Montesorri en el hogar

 

MÉTODO MONTESSORI EN EL HOGAR

Cuando pensamos en la manera de adaptar nuestros hogares al pensamiento Montessori,
debemos darnos cuenta de lo importante que son las cosas que ponemos en ellos, en
especial aquellas con las que nuestros hijos entrarán en contacto en sus tres primeros años
de vida. Los niños absorben todas las impresiones como esponjas, por ello hay que tener
presente dosobjetivos:
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La organización de la casa debe contribuir a que el niño sea más independiente y tenga
mayor seguridad en sí mismo sin perder jamás de vista la salud y la seguridad.

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Planificar una vivienda que dé una impresión de orden y belleza.

Observa el tamaño de las cosas que hay en tu casa, lavabos e inodoros, sillas, mesas, sofás,
camas, etc. Y sin poner la casa patas arriba, intenta modificarlas habitaciones principales
para acomodar a tu hijo más pequeño.
SEGURIDAD:
La seguridad es, y debe ser siempre, una de las máximas prioridades. No obstante, los niños
deberían ser libres para moverse por la casa e investigar. Nuestro objetivo es preparar el
entorno para que sea seguro para los bebés y los niños de corta edad que se encuentran bajo
nuestra supervisión sin tener que preocuparnoscada minuto por si algo terrible pudiera
suceder. Muchos padres están excesivamente preocupados por la seguridad, lo cual les lleva
a confinar a sus hijos pequeños en cunas, parques, sillitas de bebé, tronas… Por un lado
parece razonable confinar a los niños por motivos de seguridad, paro los padres deben
comprender también que cada hora que el niño pasa en el portabebés es una oportunidadperdida. Si les hubieran dado mayor libertad, sus bebés podrían haber desarrollado la
coordinación y la fuerza muscular al tiempo que experimentaban la estimulación sensorial
que supone aprender de primera mano. Puedes crear un entorno en el que tu hijo pueda
moverse libremente y explorar sin nada que temer.
CÓMO OBSERVAR:
No hay mejor manera de comenzar a aplicar en casa los principios Montessori quesentarse
a observar qué mira tu hijo, qué dice y qué hace. Los niños tienen mucho que enseñarnos
acerca de sus necesidades e intereses. Basta con prestar atención.
Para observarle, tal vez te resulte útil tomar notas en un diario para que puedas dejar
constancia de ello. Dedica con regularidad cierto tiempo a observar a tu hijo. Siéntate en un
sitio cómodo cerca de él para que puedas verle y oírlesin problemas. Intenta interpretar lo
que significa el comportamiento de tu hijo. Cuando observes que algo le llama
poderosamente la atención, piensa en formas de introducir actividades nuevas que alimenten
e incrementen este interés.

 

Cada vez que te pongas a observar a tu hijo, procura olvidar experiencias o percepciones
anteriores y céntrate en lo que realmente está pasando en ese momento.Mientras el niño
juega, observa qué juguetes elige, cómo los utiliza, si tiende a jugar solo o con otros niños,
cómo se mueve por la casa, se mueve de un lugar a otro en silencio o lo hace con
considerable alboroto, observa si hay alguna habitación de la casa en la que prefiera estar y
qué parece atraerle de ésta. Mientras come, fíjate en qué es lo que más le gusta, si tiene
buena coordinaciónutilizando los cubiertos, si bebe sin derramar el agua, si le gusta
comentar cómo le ha ido el día, etc.
Cuando estés observando al niño, piénsalo dos veces antes de interferir con aquello que está
haciendo. El objetivo es aprender de lo que hace, no ponerte de pie en un salto y corregirle.
ADAPTAR LA CASA A UN NIÑO:
Si se les deja a su aire, los niños puede que armen un caos pero, al mismo tiempo,aman y
precisan de modo imperioso un entorno ordenado. Procura arreglar las habitaciones donde
tu hijo pasa la mayor parte del tiempo, de forma que le resulte fácil mantenerlo todo pulcro
y bien organizado. El impacto que esto puede tener en su personalidad es sorprendente.
1. Habitación familiar:
Arréglala pensando en tu hijo. Debería tener estanterías accesibles donde el niño pueda
tener libros...