Morales
Los trabajos musicales deCristóbal de Morales dan a menudo voz musical a notables acontecimientos de su tiempo: así, la cantata Iubilemus omnis terra, que alcanzó amplia y duradera popularidad, fue escrita para celebrar latregua de Niza entre Francia y España, obtenida por el papa Paulo III en 1538; los mismo puede aplicarse a la cantata Gaude et laetare Ferrariensis civitas, ejecutada en la catedral de Ferrara enocasión del cardenalato de Hipólito II de Este en 1539.
Sus obras alcanzaron inmediata y amplia difusión en Francia, en Alemania y en Italia, especialmente en Venecia. En 1545 fue nombrado maestro decapilla de la catedral de Toledo; en 1551, de la de Málaga, en la que permanecería hasta su muerte. Para subrayar que la fama de Cristóbal de Morales conoció una amplitud vastísima para aquel tiempo secuenta que su música fue conocida también en Nueva España.
Rabelais y Cervantes, contemporáneos suyos, de genio espiritual completamente distinto, ponderan el renombre de este compositor, a quien sepuede colocar entre Joaquín des Près y Palestrina. De él se recuerdan dos libros de motetes a cuatro voces; un libro de motetes a cinco voces; un libro de misas; lamentaciones a cuatro, cinco y seis...
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