Ms Psicologia Laboral
Cuando hablamos del Reino de Dios muchos pensamos en un lugar especial, tal y como lo describe el libro del Apocalipsis, con casas de oro, calles de plata y mar de cristal, opensamos en el futuro en un lugar donde las almas revestidas de espíritu puedan verse y amarse, disfrutando la eterna presencia de Dios y su gloria.
Pero cuando la frase dicha por Jesús Mas buscadprimeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. (Mateo 6:33)
Jesús no se refería a ninguna de estas dos cosas más bien se refería a aceptar la condición de siervo dondenuestra obediencia nos lleve a hacer la voluntad del Rey que nos gobierna. No tomando iniciativa y derrochando experiencia adquirida, ciertamente Dios no quiere robots ni autómatas, nos otorgo elLibre Albedrio como regalo o don de su inexplicable amor por nosotros, y sabe que nuestra propia naturaleza nos lleva a aplicarlo aun en contra de nuestro favor.
Esta época que ahora vivimos nos lleva aser independientes, auto suficientes, a seguir las tendencias de liderazgo y administración que los países desarrollados han aplicado como la clave del éxito donde se busca la felicidad.
Yo no veosegún la historia entre el año 1 y el siglo XV que la gente se preocupara por la felicidad simplemente sus recursos básicos eran su mayor preocupación: comer, vestir y descansar.
Claro que siemprehan existido personas que buscan el poder económico y religioso y además las riquezas, y esto nos ha llevado a grandes confrontaciones y guerras, donde el rico se vuelve más rico y el pobre más pobre.En donde el abuso del poder precisamente nos lleva a cuartar la libertad y nos convertimos en esclavos de tendencias y dependencias.
El libre albedrio nos debería de llevar siempre a escoger lomejor para nosotros, donde podamos expresarnos libremente y sentirnos felices con nuestras acciones.
Durante muchos años soñé con ser un alto ejecutivo de empresa, no sin dejar de saber que la vocación...
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