Muerte Sin Fin
21/mayo/2012
¡Más qué vaso -también- más providente! Tal vez esta oquedad que nos estrecha en islas de monólogos sin eco, aunque se llama Dios, no sea sino un vaso que nos amolda el alma perdidiza, José Gorostiza, Muerte sin fin. Realizar un verdadero análisis filosófico de Muerte sin fin, porla complejidad y magnitud del poema, sería un trabajo que llevaría mucho más de lo que puedo ambicionar con el siguiente ensayo. Por lo tanto, para fines de este análisis me limitaré a tomar la parte inicial del poema, específicamente en la metáfora del agua y el vaso, y cómo ésta se va desarrollando a lo largo de la obra. Intentaré interpretar estos conceptos de Gorostiza y compararlos con algunosfragmentos del Fedón, así como con ideas de San Agustín sobre las características del alma. Además pretendo exponer, desde un punto de vista personal, la multiplicidad de interpretaciones que tiene Muerte sin fin, y la dificultad literaria que representa. Muerte sin fin, a la manera a la que he logrado entenderlo, busca describir la realidad del hombre en cuanto a cuestiones trascendentales. Elhombre se pregunta por su existencia, por las formas, la materia y por Dios. Sin embargo debo de confesar que después de leer el poema, quizás por mis escasos conocimientos y experiencia literaria, pienso que existen partes únicamente descifrables para el autor. La escritura del poema me parece tan enigmática en muchos puntos, que el esfuerzo para darle un sentido filosófico puede ser comparable aencontrarle verdadera profundidad a I am the walrus de los Beatles. Tiene el amor feroces galgos morados; pero también sus mieses, también sus pájaros. Ay, pero el agua, ay, si no luce a nada. Sabe a luz, a luz fría, sí, la manzana. ¡Qué amanecida fruta tan de mañana! ¡Qué anochecido sabes, tú, sinsabor! ¡cómo pica en la entraña tu picaflor!1
1 GOROSTIZA J., Muerte sin fin, consultado en:http://www.filosoficas.unam.mx/~morado/gorostiza.htm (19/05/2012).
La cita anterior, quizás descontextualizada, refleja, en mi opinión, de que manera hay partes que están tan abiertas a la libre interpretación, que uno debe preguntarse si en realidad existe un hilo conductor a lo largo de todo el poema. Al parecer, no podemos encontrar una sola lectura al poema. Cada vez que nos aproximamos,dependiendo de nuestro propio estado, podemos hallar respuestas o nuevas interrogantes. Cómo lo dice Dr. Evodio Escalante Betancourt en su ensayo sobre José Gorostiza: Entre la redención y la catástrofe, el poema Muerte sin fin presenta muchas interpretaciones radicalmente distintas que van desde la Cábala, hasta Federico Nietzsche. Encontramos todo tipo de intuiciones filosóficas un auténtico jeroglíficoque algunos estudiosos, en su intento por descifrarlo, han recurrido al “árbol sefirotal” de la Cábala o han creído encontrar afinidades con ciertas oraciones budistas que se recitan ‘al revés’, de atrás hacia adelante, además de que no han faltado quienes -agrega el autor- lo vinculan con el anuncio nihilista de la “muerte de Dios”, puesto en circulación por Federico Nietzsche2. La dificulta delpoema también recae en gran medida en el estilo y los recursos utilizados por Gorostiza, en ciertos puntos el poema se vuelve, en mi experiencia, muy difícil de seguir. El inicio del poema no es menos enigmático que el resto. Podemos entender que el narrador al encontrarse ahogado por un dios inasible, con las alas rotas, y un torpe andar por el lodo, en condiciones que suenan depresivas opaupérrimas se descubre a si mismo en la imagen del agua. Este descubrimiento nos lleva a plantear que para el resto del poema el hombre puede estar representado por el líquido vital. Lleno de mí, sitiado en mi epidermis por un dios inasible que me ahoga, mentido acaso por su radiante atmósfera de luces que oculta mi conciencia derramada, mis alas rotas en esquirlas de aire, mi torpe andar a tientas...
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