muerte
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agnus Bane podría o no estar saliendo con Alec
Lightwood. Pero, definitivamente necesita encontrarle el
obsequio de cumpleaños perfecto. Octava aventura en
las Crónicas de Bane.
Situado entre Ciudad de cenizas y Ciudad de cristal, el brujo
Magnus Bane está determinado a encontrar el mejor obsequio de
cumpleaños posible para Alec Lightwood, el Cazador de Sombras con
elque podría estar saliendo, o no. Y también, tiene que lidiar con el
demonio que ha evocado para un cliente muy irritante. . .
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Traducción y corrección:
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tienes que hacer es solicitarla a la
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“Prueba de *** ” y la prueba que quieres hacer. En el
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Para hacer esta prueba tienes que crear una portada tamaño
Carta (81/2″*11″) o A4, que contenga como título “Ministry of
Lost Souls”. ¡El resto depende de tu imaginación! Al tenerla,envíala a la dirección blogdetraducciones@gmail.com con el
asunto “Prueba de Diseño”, la evaluaremos y te comunicaremos
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agnus se despertó con la suave y dorada luz del mediodía
filtrándose por su ventana y con su gato durmiendo sobre su
cabeza.
Presidente Miau algunas veces demostraba su cariño de esta desafortunadamanera. Magnus, de manera gentil, pero firmemente, desenredó al gato de su
cabello; sus pequeñas garras haciendo más daño aún, mientras Presidente era
removido con un largo y triste llanto felino de incomodidad.
Después el gato saltó a la almohada, aparentemente completamente
recuperado de su terrible experiencia, y luego saltó de la cama. Cayó al piso con
un suave golpe y se estrelló con ungrito de guerra en su plato de comida.
Magnus rodó en la cama, de modo que yacía de costado a través del
colchón. La ventana que daba a su cama era un vitral. Diamantes dorados y
verdes se desplazaban por sus sábanas, descansando cálidamente sobre su piel
desnuda. Levantó la cabeza de la almohada y se dio cuenta de lo que estaba
haciendo: buscando en el aire un rastro de olor a café.
Estohabía pasado algunas veces durante las últimas semanas. Magnus
tropezando hasta la cocina, hacia el rico olor del café, colocándose una bata de su
amplia y variada selección, para luego ir a encontrar a Alec. Había comprado una
cafetera porque Alec parecía constantemente afligido por su mágicamente sutil
robo de tazas de café y té del “MuddTruck”. La máquina era una molestia pero
Magnus estabacontento de haberla comprado. Alec, debía saber que la cafetera
era para él y su delicada sensibilidad moral. Parecía tener una sensación de
comodidad sobre la cafetera como no lo tenía con nada más, preparando café sin
preguntar si podía, y llevándole a Magnus una taza cuando estaba trabajando.
Con las demás cosas en el apartamento de Magnus, Alec todavía era cuidadoso,
tocándolas como sino tuviera derecho a ellas, como si fuera un invitado.
Y por supuesto era un invitado. Solo que Magnus tenía un deseo irracional
de que Alec se sintiera como en casa en su apartamento, como si eso significara
algo, como si le diera a Magnus algún derecho sobre Alec o que indicara que
Alec quería algún derecho sobre él. Magnus suponía que eso era. Quería
desesperadamente que él quisiera estarahí, y que se sintiera feliz estándolo.
No podía secuestrar al hijo mayor de los Lightwood y quedárselo como
decoración de la casa. No obstante, Alec se había quedado dormido dos veces, en
el sofá, no en la cama. Una, después de una larga y lenta noche de besos, y otra
cuando había venido a tomar un café, claramente exhausto después de un largo
día cazando
demonios. Se había...
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