Mujeres y economía

MUJERES Y ECONOMÍA
La economía es una de las ciencias que más impermeables ha resultado a los estudios feministas, como hemos podido comprobar a través de las lecturas,. Tal como explica Cristina Carrasco la economía "mantiene el dudoso privilegio de continuar bajo dominio masculino". Y es que la perspectiva de género en economía -como en otras ciencias- ha intentado cambiar tanto losconceptos tradicionales como la metodología usada. Desde el siglo XVIII ha habido muchos debates sobre "la mujer", tanto desde una perspectiva económica, cultural y política, pero no se ha llegado nunca a un consenso sobre qué es aquello que representa a las mujeres, ya desde la época del "sujeto universal" inaugurada por la Ilustración. Los estudios feministas han intentado denunciar la invisibilidadde la mujer en los estudios clásicos y neoclásicos, una tradición que olvidó considerar el trabajo no remunerado o doméstico.

El texto de Gardiner, "Los padres fundadores", hace un repaso a las diferentes corrientes que históricamente se han dado en economía, empezando por el siglo XIX, tiempo de cambios radicales que modificaron muchos aspectos en el mundo: industrialización y consolidaciónde la economía capitalista, nacionalismos, colonialismo, derechos de los trabajadores...

Tal como explica Gardiner, a partir de la publicación de "La riqueza de las naciones" de Adam Smith (1776) el género y el trabajo doméstico han sido, históricamente, excluidos del pensamiento económico, salvo alguna excepción como fueron Taylor y Stuart Mill.
En primer lugar, la escuela clásica, fundadapor Smith, se preocupó principalmente de la expansión de la riqueza y la distribución de la renta, a partir de los ejes de especialización e intercambio, que debían ser, según Smith, los temas centrales de la nueva teoría económica. Según la autora, las relaciones domésticas habían ocupado, históricamente, un lugar central en la vida económica, y no el intercambio. Pero con la nueva disciplina dela economía, el trabajo doméstico quedaba fuera del análisis por no corresponder a una relación de intercambio y ser considerado un ámbito de "moralidad y altruismo". Así, los hogares y las actividades realizadas en ellos quedaron marginados por no estar organizados "según los principios de una división social del trabajo y de la especialización, ni se basaba en el intercambio", tal como explicaGardiner.
Así pues, como la prestación de servicios en el hogar no cabía en los ámbitos de la riqueza y la acumulación de riqueza estaba ligada directamente al proceso productivo, el trabajo doméstico no tenía interés en el nuevo discurso económico.
Según Gardiner, la especialización supuso un mayor control sobre el esfuerzo humano dedicado a la producción y distribución del producto, hechoque facilitaba el crecimiento económico, pero no era aplicable al trabajo doméstico, que no cumplía los criterios de Smith sobre eficiencia. Para Adam Smith, la mujer no debía dejarse guiar por el interés personal (que guiaba el trabajo productivo) y dedicarse al matrimonio. Aún así, Smith introdujo una cierta referencia a las aptitudes adquiridas, hecho que puede interpretarse como una referenciaa la educación en el capital nacional.
Por lo que respeta a los demás economistas clásicos, tampoco trataron las cuestiones de género, salvo el caso de John Stuart Mill y Harriet Taylor. Ambos autores trabajaron juntos contra la exclusión de las mujeres desde la óptica de la nueva economía liberal, alejándose de los supuestos patriarcales de los cuales partían las otras teorías clásicas yaplicando a mujeres y hombres los principios del liberalismo. Platearon el matrimonio como un relación entre iguales, sin conceder más autoridad al padre. Relacionaron la subordinación de las mujeres en el matrimonio con las restricciones en el empleo, y a su vez la subordinación jurídica con la subordinación política y económica. Aunque entre ellos había algunas diferencias, como por ejemplo en la...