Musicalización Del Cuerpo Objeto

El cantar del cuerpo y el objeto

La micro estaba yendo por la Alameda. Esquivaba a todos los taxis para avanzar lo más rápido posible. La gente sentada mirando fijamente un punto, se me movía con el vaivén. Algunos sólo observaban, o se observaban, pero en general sus ojos se mostraban inmóviles, en dirección hacia alguna ventana. Cuando me acerqué a la puerta para tocar el timbre de bajada,escucho un ruido organizado, consciente. Entonces me giro hacia al lado buscando esa fuente sonora que emitía rítmicamente un sonido llamativo entre tanto ruido disperso, típico de maquinaria. Lo primero que veo es una mano dándole golpes al asiento donde se encontraba sentado aquel joven. Luego percibí que aquel ritmo estaba compuesto por más de una fuente de origen, pues mis ojos no veíanconcordancia con aquello que escuchaba. Una vez que miré por completo al hombre, me di cuenta que casi movía las manos por intuición, pues su mirada estaba tan fija en el exterior, que parecía estar concentrado en sí mismo al mismo tiempo que escuchaba música y emitía un ritmo.

No pude bajarme de la micro. Estaba casi más concentrada que él en el ritmo que producían sus manos al chocar con cualquiersuperficie. Movía la cabeza e intentaba reconocer el estilo musical o la canción que le provocaba la necesidad de soltar ese ritmo. Era como si no quisiera tararear o cantar en público, pues en general esas ganas se reprimen por vergüenza a ser escuchado y juzgado como loco, desubicado o desafinado. En cambio esa percusión le salía de manera innata, como si cantara con las manos sin que la menteintercediera en el quehacer espontáneo. Si bien sus ojos mostraban una concentración interna, sus extremidades cantaban al son de una batería imaginaria que ni siquiera era necesaria de concretizar. Quizás, podría haber estado ensayando una partitura rítmica ya conocida, o tal vez no tenía relación con el oficio musical y sólo estaba siguiendo sus impulsos que emergían a partir del estímulo que lebrindaba una canción. Le miraba el rostro y las manos, pero su atención distaba de prestarle importancia a mi presencia observadora.

Me fijo entonces en sus enormes audífonos que retumbaban levemente, dejando salir el resto de sonido no absorbido por sus oídos. Era imposible identificar aquel bullicio con algún tema, pues por más que le prestara especial atención, sólo llegaba a mí unaresonancia que se tornaba más desagradable de escuchar que cualquier ruido de calle. Los golpes que hacían sus manos, eran entonces la interpretación de aquello que él escuchaba, ergo, lo que yo escuchaba armonioso era su interpretación y no la música proveniente de ese aparato electro individualista. Su cuerpo en relación al objeto silla, revelaban algo esencialmente musical.

Ahora bien, podríamoscomenzar a problematizar este ejemplo vivencial diciendo que aquello que el sujeto hacía sonar no era más que un ruido, considerado por muchos como molesto. O incluso, desde otro lugar conceptual, podríamos decir que la ejecución de uno o más sonidos desorganizados entre sí, podrían conformar una situación ruidosa. La diferencia entre estos dos términos conceptuales dependerá de la definición quecada autor haga del ruido y del sonido, puesto que además, al primero se le adjudica una visión despectiva en comparación al segundo. Es muy diferente pararse a escuchar una clase de veinte alumnos hablando al mismo tiempo para conseguir ser escuchados de manera individual, que esas mismas voces emitieran un sonido organizado bajo cualquier estructura. Más que afinación, es organización y más queemitir es tal vez, escuchar. Y con ello, hago referencia a John Blacking y su concepción sobre la escucha creativa y el sonido organizado.

Si concordamos con la idea de que todo ser humano es un espectador activo del acontecer social, -entendiendo que la apertura hacia escuchar, ver o sentir, hace posible la interpretación- entonces asumimos que todos tenemos la capacidad de responder a un...