Nada
Existe bastante acuerdo respecto a que la mayoría de los accidentes de tráfico ocurren como resultado de conductas de riesgo de los conductores, que pueden ser más o menos voluntariamente asumidas, aunque muchas veces cueste entender la causa por la que alguien pueda realizar a propósito conductas que tienen muchas probabilidades de terminar en accidente oincidente vial. Entre las muchas características del conductor que inciden en el comportamiento asumido, las actitudes tienen una consideración cada vez mayor en el ámbito de la Seguridad Vial y son objeto de numerosos estudios. A pesar de que no está del todo claro el papel que éstas juegan, parece indudable que determinadas actitudes de riesgo tienen gran importancia en la producción de accidentes.Por otra parte, preocupa el tema del cambio de actitudes, si bien, dada la amplitud de medios y medidas que suelen aplicarse al mismo tiempo en las actuaciones para la seguridad vial, resulta difícil discriminar a qué medidas específicas de las aplicadas se les pueden achacar posibles cambios de actitudes detectados. Se precisa más investigación para aclarar esta cuestión, pero entre losprofesionales del ámbito de la seguridad vial existe el convencimiento de que la modificación de determinadas actitudes negativas puede ser muy efectiva en la reducción de accidentes.
De la revisión de numerosos estudios en el ámbito de la Psicología Social puede deducirse que existe un acuerdo más o menos generalizado acerca de los elementos básicos que conforman una actitud. Aun así siguenplanteándose diferentes definiciones de esta variable psíquica y, sobre todo, diferentes explicaciones de la relación entre actitud y conducta.
Los planteamientos de los conductores, sus valoraciones y creencias, así como sus condiciones físicas y psíquicas marcan su manera de desenvolverse en un medio tan complejo como el de la conducción de vehículos. De hecho, se conocen bastante bien ciertascondiciones psicofísicas que suponen un incremento enorme del riesgo implícito en la actividad de la conducción, pero todavía tenemos mucho que entender acerca de las actitudes, valoraciones y afectos, que están en la base de comportamientos especialmente arriesgados.
Con esta idea de fondo, investigadores de los institutos de seguridad vial de un amplio grupo de países europeos se plantearon realizar unestudio, lo más completo posible, de las actitudes y comportamientos frente al riesgo vial de los conductores europeos, así como de otras variables socio-laborales, familiares y relacionadas con su experiencia como conductor, que pudieran aportar entendimiento de tales actitudes y comportamientos, a la luz de la historia personal. Como en cualquier otro problema, para poder aportar soluciones alos de la conducción, es preciso ampliar el conocimiento de posibles causas de determinadas conductas. El estudio, se conoce con el acrónimo SARTRE, por las iniciales en inglés del título y tema investigado:
Autopercepción por edad y género
— Valoración que hacen los conductores y conductoras, jóvenes y mayores, de su propia forma de conducir en comparación con los demás.
— Se analizaránespecíficamente los grupos de conductores que se consideran a sí mismos más peligrosos, caracterizándolos en función de variables sociodemográficas.
Actitudes y Conductas de riesgo asumidas, según edad y género
— Opiniones, valoración y posición personal de los conductores españoles en relación con velocidad y alcohol, entre los muchos temas encuestados.
— Comportamiento referido por los diferentesgrupos de edad y género, respecto a los temas citados, con especial atención a los conductores que asumen las posiciones de mayor riesgo.
A ) Autopercepción de los conductores según género y edad. Resultados
Con el propósito de valorar si hay diferencias en la percepción que tienen de sí mismos los conductores de los distintos grupos de edad y género, se analizan las respuestas a la...
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