Navio los vio salir

"Nadie los vio salir" de Eduardo Antonio Parra reseña por Javier Alejandro Dueñas Sánchez.

No hace falta moverse para poder viajar. Esta sentencia queda fácilmente comprobada en el cuento Nadielos vio salir, del guanajuatense Eduardo Antonio Parra, publicado por primera vez en el 2001. Se trata de un cuento corto, de no más de cuarenta páginas, que nos transporta a otro lugar y momento conapenas leer unas líneas. Es uno de esos libros ideales para leer en una tarde de café o mientras se está en la incomodidad de una sala de espera y que al terminarse, dejan un muy buen sabor de boca.Eduardo Antonio Parra es originario de León, Guanajuato, aunque residió gran parte de su vida en Monterrey, Nuevo León, donde estudió Letras Hispánicas. Desde entonces ha destacado como cuentista yensayista, siendo por esto becario del Centro de Escritores de Nuevo León y del Sistema Nacional de Creadores del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes. En el 2000, gracias a Nadie los vio salir,Eduardo Antonio Parra se hizo acreedor del Premio de Cuento Juan Rulfo.
Quizá el hecho de que Parra haya residido en el norte del país durante tanto tiempo es lo que permite que Nadie los vio salir,resulte una narración casi tangible. Para empezar, la historia se desarrolla en un bar de mala muerte ubicado en la frontera con Estados Unidos. En esta especie de cantina, con olores nauseabundos queresultan de la combinación de sudor y orina, los gringos son los clientes más asiduos y también, por qué no decirlo, los mejor atendidos por las prostitutas que ahí trabajan.
Es de hecho unaprostituta, llevada más por la necesidad que por las ganas a trabajar en el bar, quien nos narra la historia con un lenguaje sencillo y coloquial. A través de este personaje bastante común, Parra nos describeel modus operandi de uno de los sectores más bajos de la sociedad mexicana. Los personajes son pues, fácilmente identificables para el lector, ya que sería muy extraño que un mexicano no conozca a...