Nelson Romero

EL HOMBRE ARTISTA, MUERE EN LA LUZ
Ingrid Geraldine Rodríguez Quintero
“… siempre buscamos tenderle a la muerte
la trampa salvadora, el artificio que socorre…”
Nelson Romero
El hombre nace para lamuerte y en la tarea de vivir, muere sustancialmente en cada situación en las que sus frustraciones, miedos y crisis de evasión no logran permitirle la energía vital para construirse, de ahí que lapoética de Nelson Romero en su obra Surgidos de la luz, configure los conceptos de vida y muerte como principios dialecticos del hombre, hace de éste un artista, escultor de su devenirexistencial en medio de su gran complejidad, cada palabra elaborada denota la consciencia de deficiencia humana, paralela a la gran integridad que es también su condición.
El poeta muestra el saber quereflexiona sobre las amplias disyuntivas morales que poseen los sujetos, aquellos desniveles existenciales que restringen el pensamiento y el accionar del hombre y lo bestializan. Su sensibilidad retornaal estado primigenio, permitiéndole la extinción.
La tormenta que me lleva y me trae
Hace de mí un pájaro desvalido
¡La vida no me dio alas! Sólo desniveles.
Tuve que vengarme de su crueldad
Negándolaen la belleza
(Reflexión)

Ahora, si bien el hombre se ausenta de su realidad dado a la cantidad de penumbras que experimenta, le es posible escapar de nuevo a la luz. Este es un proceso incesantede retorno, que le permite lograr la grandeza de su esfuerzo por reconstruirse y el dominio del yo, de resolver la discusión frente a quién es, dentro y fuera de la multiplicidad de dimensioneshumanas. Evoca, entonces, la satisfacción por encontrarse con su ser a pesar de su crisis individual, tal cual como expresa Romero

Pintar la locura de los girasoles
Y hacer que iluminen la oscuridad delhombre.
Esa es la grandeza.
Lo demás se subasta fácil como telas de holán.
Pero nada más cercano a la gloria
que un girasol que está muerto,
y nos alumbra.
(Para un homenaje)

Sin embargo, si esta...