Nestrec07

Me cansé de enterrar a mis amigos.
La frase no es de un hombre que ha tenido que huir despavorido del fuego cruzado que mata y desplaza campesinos en las zonas de violencia.
Es de Iván*, un joven de 16 años, estudiante de un colegio de Fontibón, en el occidente de Bogotá, hijo de un electricista y de una costurera. Un muchacho rebelde que cuando tenía 12 años decidió unirse a una pandilla de subarrio.
No se ruboriza cuando cuenta que vendía éxtasis en los bares de la avenida 15, en el norte de la ciudad, y que un día se cansó de enterrar a sus amigos o de ir a visitarlos a la Modelo.
Hace dos años cayó en una redada y un juez de menores, a pesar de que Iván tiene familia, lo envió al centro educativo El Redentor, en Bogotá, una escuela de reeducación para menores, manejada por losreligiosos Terciarios Capuchinos. Con él están otros 326 internos que no pueden salir sin orden judicial.
Según cifras del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), como Iván han pasado este año 17.619 menores por los 130 centros de reeducación que hay en el país. Hasta la fecha, en Bogotá, han estado 7.070 niños en 11 establecimientos, el 51 por ciento de los casos por hurto.
Estascifras no solo demuestran el grave problema de delincuencia juvenil que vive el país, sino que el debate por un sistema de judicialización justo y que no perjudique a los niños está en mora de hacerse.
En eso coinciden funcionarios del Estado, entidades defensoras de los derechos de los niños, expertos y ONG, presentes en el foro Responsabilidad penal juvenil, organizado ayer, en Bogotá, por laFundación Antonio Restrepo Barco y la Universidad Externado de Colombia (Ver recuadro).
Los antecedentes Actualmente, los menores de 18 años no son imputables, es decir, la ley considera que no tienen la capacidad de comprender el efecto de su comportamiento.
El próximo año, en marzo, se presentará en la plenaria de la Cámara de Representantes el Proyecto de Ley por el cual se crea el sistema deresponsabilidad penal juvenil.
Este, le garantiza al menor el debido proceso y evita que un juez de manera discrecional decida si lo interna en un centro de reeducación o lo entrega a sus familiares. Además, permite una segunda instancia en el proceso, que hoy no existe.
El proyecto señala que los menores de 15 años no serán privados de la libertad a título preventivo, de pena o de medida deseguridad, excepto en los casos de delitos de especial gravedad, cuando se reúnan los presupuestos procesales para ello .
Agrega que a los niños mayores de 12 años y menores de 15 años, solo se les podrán aplicar medidas socioeducativas, que no impliquen privación de la libertad, salvo en los eventos contemplados en esta ley .
Con respecto a los mayores de 15 años y menores de 18, indica que,excepcionalmente, podrán ser privados de la libertad.
Sin embargo, el proyecto propone para algunos delitos procesos de reeducación, incluyendo internamiento, hasta de 10 años.
El juez de menores, José Fernández asegura que un menor sí se puede judicializar. Actualmente, hay una franja delincuencial entre los 15 y los 18 años que amerita que el Estado tome determinaciones al respecto, por ejemplo, enhurto calificado y agravado que genera impunidad.
La Defensoría del Pueblo argumenta que en el proyecto de ley, con el concepto de protección integral, el Estado convierte al menor en objeto de protección y le niega el principio universal de ser sujeto de derechos, en donde tiene deberes y responsabilidades.
Ligia Galvis, abogada de familia, afirma que esta es una desventaja, porque la autoridadtiene toda la discrecionalidad para actuar mientras el menor no tiene ningún mecanismo de defensa, por robarse un huevo, porque tiene hambre, puede ser tratado igual que un sicario, asegura.
Igualmente, le preocupa que con las medidas de conmoción interior lo puedan someter al tratamiento penal ordinario, si es cogido en flagrancia.
Mario Gómez, de la Fundación Restrepo Barco, que hace parte del...