Neurociencias
Neurociencias
Sergio Pelliza (Compilación y armado) Introducción ¡Cuidado con las neurociencias! A fines del siglo XX asistimos a una revolución en biología que no tiene precedentes en la historia. Los conocimientos sobre el cerebro avanzan a tal ritmo, que cada día se percibe más su impacto social. Por ello se los emplea también para fines políticos. Hacer creera la gente que la gente es un robot, manejado por su cerebro, sirve a ambos extremos del espectro político. Al capitalismo salvaje, que pone la gente al servicio del dinero, le conviene que la gente se crea robot para que acepte la exclusión cultural y económica de grandes grupos empobrecidos, su explotación e incluso su bombardeo: "total", haráse pensar, "no son más que formas naturales,estructuras que se rompen y se los favorece al terminar con su vida miserable". A los revolucionarios menos ilustrados, que ponen la gente al servicio de la sociedad, les conviene que la gente se crea robot para que crea que la vida no tiene sentido más que en lo material, de modo de socavar las religiones utilizadas políticamente por algunos regímenes como la monarquía francesa del siglo XVIII.Coinciden, pues, los dos extremos políticos: al capitalismo salvaje le conviene que las neurociencias digan que la gente son robots para bloquear la solidaridad internacional y a los revolucionarios de filosofía hegeliana les conviene que las neurociencias digan que la gente son robots para atacar al uso político de la fe religiosa. Ambos son antipersonalismos; para ambos las personas no tienen valorintrínseco y otras cosas (el dinero, o los grupos colectivos) son lo único que vale. Pero las neurociencias no dicen lo que los antipersonalismos quieren; no dicen que la gente sea una máquina cerebral, ni que el cerebro crea la mente. A menudo se lee eso porque muchos centros de neurociencias son sostenidos por aquel capitalismo para generar su propaganda o por científicos materialistas quehonestamente creen que la vida no tiene sentido fuera de lo material. Esos son las fuentes más numerosas de lo que se lee como "neurociencias". Pero sus desaciertos y falsedades han ido revelándose y es posible leer otras fuentes, incluso en Internet, donde van apareciendo descripciones más precisas de los hechos neurocientíficos. Las neurociencias no tratan de contestar a la pregunta "¿Qué son laconciencia y la mente humana?" Sabemos que el cerebro sólo genera sensaciones en un psiquismo, digamos el psiquismo del lector, que se halla asomado a ese cerebro; no en el psiquismo del vecino. La determinación de a qué cerebro se asoma cada uno no proviene de ese cerebro. Este no podría determinar quién lo va a usar, de modo que las neurociencias, que estudian el cerebro, no pueden contestar aquellapregunta ni tienen por qué intentarlo. Pretenderlo es parte de la propaganda de los dos extremos ideológicos, los antipersonalistas antes mencionados. Sí sabemos que cada cerebro es manejado por un psiquismo particular e incanjeable, que puede cambiar los estados de ese cerebro de modo de comandar conductas (por ejemplo, usted puede mover un dedo) y que es afectado por los estados de ese cerebro. ¿Porqué experimentamos emociones? Porque los campos eléctricos del cerebro generan estructuras dinámicas en otro campo físico al cual el psiquismo allí asomado (no el de un vecino) reacciona. ¿Por qué aparecen las enfermedades psiquiátricas o neurológicas? Porque cerebro y psiquismo interactúan, aunque no pueden reducirse uno al otro. Estas son algunas preguntas básicas que la neurociencia intentacontestar detalladamente en beneficio de la humanidad. Las Neurociencias estudian el sistema nervioso desde un punto de vista multidisciplinario, esto es mediante el aporte de disciplinas diversas como la Biología, la Química, la Física, la Electrofisiología, la Genética, la Psicología, la Antropología Filosófica, la Epistemología genética, la Paleoneurobiología, la Neuropaleontología, la...
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