Neuronas Espejo
de la identificación social1
Vittorio Gallese2
Una vía conduce desde la identificación, a través de la imitación, hasta la empatía,
esto es, hasta la comprensión del mecanismo mediante el cual somos capacitados
para adoptar alguna actitud hacia otra vida mental. (Freud, 1921, p. 110)
Desde el mismo comienzo de la vida, la dimensión social juega un papel poderoso,
dándole forma a nuestra relación con el mundo. El comportamiento social no es
privativo de los primates. Sin embargo, para todas las especies sociales y –en las
especies más evolucionadas de primates– y para todas las culturas sociales de
cualquier grado de complejidad es central la noción de la identificación social de
los individuos en el interior de esas especies y culturas. Todos los niveles de
interacción social utilizados con la finalidad de caracterizar la cognición en
individuos particulares tienen que interseccionar o sobreponerse para posibilitar
el desarrollo del reconocimiento mutuo y la inteligibilidad.
¿Cómo se construye la identificación social? ¿Cuáles son los mecanismos
neuronales que posibilitan su emergencia? Este trabajo intenta proporcionar
respuestas preliminares a estas dos interrogantes.
La identificación social puede ser articulada en muchos niveles diferentes
de complejidad. No obstante, con independencia de cuál sea la complejidad, la identificación social es crucial a la hora de permitir la existencia de la sensación de
pertenecer a una comunidad más amplia de otros organismos. Esta hipótesis que
se está proponiendo aquí es que la identificación social incorpora los dominios de
acción, sensaciones, afecto y emociones y que está apuntalada por la activación de circuitos neuronales compartidos. El espacio intersubjetivo compartido en el cual
vivimos desde el nacimiento posibilita y desencadena la constitución del sentido
de identidad que normalmente sostenemos con otros. Cuando observamos otros
individuos que actúan y encaramos su rango completo de fuerza expresiva (la
forma en la que actúan, las emociones y sentimientos que despliegan), se establece automáticamente un nexo interpersonal encarnado significativo.
El descubrimiento de las neuronas espejo y de otros mecanismos de
espejeamiento en el cerebro humano muestra que los mismos sustratos
neuronales se activan tanto cuando tales actos expresivos son ejecutados como
cuando son percibidos. Por lo tanto, estamos frente a un espacio centrado en el
nosotros neuronalmente creado. Propongo que un mecanismo funcional
subyacente compartido –la simulación encarnada– media nuestra capacidad para
compartir el significado de acciones, intenciones, sentimientos y emociones con
otros, enraizando por ende nuestra identificación y conexión con otros. La
1 Artículo publicado bajo el título “Mirror neurons, embodied simulation, and the neural
basis of social identification” el año 2009 en Psychoanalytic Dialogues, 19, 519‐536. Se ha
omitido la bibliografía. Traducción por Ps. André Sassenfeld J.
2 Vittorio Gallese es una de los neurocientíficos italianos que forma parte del equipo de investigación que descubrió las neuronas espejo en el cerebro de los macacos.
identificación social, la empatía y el “nosotros” son el el terreno básico de nuestro
desarrollo y ser.
El artículo está estructurado como sigue. Resumo la evidencia
neurocientífica reciente que aclara los mecanismos neuronales que probablemente
apuntalan aspectos importantes de la intersubjetividad y la cognición social. Esta ...
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