NEURONAS
EL LABIO Y LA PALABRA
Para que el labio acepte la palabra y el beso,
para que sepa, trémulo, la voz y su misterio;
para que pueda dar de sí mismo la fuerza
de ser el testimonio de ese pacto secreto;
para que los silencios congelen en la boca
la maldición naciente y el temido desprecio
y para que ese labio se nutra en la agonía
constante de la vida
para decir el Verbo,
para llegar aÉl,
pisando nuestra tierra, nuestro barro,
el camino de alimañas infecto,
para ser, para siempre, el Otro redivivo,
es preciso vivir, pero vivir muriendo.
He gastado los años de mi vida
buscando la verdad que Tú me diste.
La perdí no sé cuando, como pierdo
las cosas que me son, que son mi origen.
Porque ha llegado el tiempo que no ceja,
el tiempo que traspasa los sentidos,
eltiempo que era nuestro y sin embargo
se nos ha vuelto absurdamente extraño.
El tiempo, mi Señor, que nos transita,
incansable y fugaz, el tiempo nuevo
que al tocarnos la frente se convierte
en el recuerdo gris del tiempo viejo.
Déjame la palabra, consérvame este labio,
aguárdame, no esperes que yo caiga
otra vez y otra vez,
porque mis llagas están hediendo ya.
Yo necesito el labio y lapalabra
para hablarte de Dios, mi compañero,
para hablarte de Tí, que me persigues
paciente y seguidor, de enero a enero.
Yo necesito el labio y la palabra,
necesito tu amor, la maravilla
de encontrarme a mí mismo en Tu sonrisa
que abona mi madero y me lo astilla.
El labio y la palabra ...
¡Mátame, que de amor
se está tiñendo el alba!
LAS PALABRAS SECRETAS
LA DIOSAIRRESPETADA
No sé cuándo has nacido.
Nunca llegué hasta el fondo que ocultan tus orígenes.
Fueron los propios hombres quienes dieron tu imagen,
y antropomorfa siguen presidiendo tu solio
con sus gradas de mármol carcomido y manchado.
Y sigues con nosotros. Te llevamos a cuestas porque eres
el aval necesario de todos nuestros actos.
Cuando nos asentamos y fundamos ciudades,
lo primero que hacemoses erigir tu estatua.
Mujer alta y esbelta.
Tuviste muchos templos y en algunos lugares
mantienes tu prestigio de matrona impoluta.
En ellos te respetan y tu estatua preside,
augusta e inasible, los ricos de tu culto.
Tus ojos son velados por una venda tenue.
y tu diestra elevada exhibe la balanza
que pesa nuestras culpas y dicta nuestras penas.
¡Qué respetable imagen!
Tu túnica hasido larga y tus formas tan múltiples
como el capricho insano de quienes te crearon.
En unas, apareces como una simple Némesis
sedienta de la sangre de quienes te ignoraron.
En otras, eres triste esclava de tiranos
con quienes no hesitaste compartir lecho y víctimas.
Pero luego... tú sabes.
El proceso de siempre.
La igualdad es un mito y aparecen las castas.
A las más despreciadasreservamos el filo de tu potente espada.
Te arrancamos la venda y aguzamos tu vista
para que nunca toques a los privilegiados.
No faltaron aquellos que te hicieron tan débil
que dejaste tu trono para mecer las cunas
de los cachorros ríspidos
que luego devoraron tu corazón vencido.
Tu balanza es un mito donde sólo las culpas de los otros se miden.
Y tu túnica blanca se convierte en harapos.Siendo nuestra aliada, sólo te despreciamos.
No nos falta razón.
¿Quién respeta a una diosa convertida en criada?
Y siendo una y tan múltiple,
es difícil llamarte con un nombre preciso.
No sé dónde podría encontrarlo,
en qué viejos santorales miniados por monjes medievales
estará la manera correcta de nombrarte.
Sí, los conozco a todos.
Pero ninguno es válido.
Quiero saber el único,el que tuviste antes
de que fueras violada.
El que te correspondía
cuando aún imperabas en las zonas abstractas de la idea,
en el empíreo estático allende las estrellas.
Entonces, tú comprendes:
Quiero llegar al punto primero de tu origen.
Quiero saber la fórmula que pueda devolverte
tu dignidad perdida.
Quiero encontrar la venda que llenamos de fango.
Quiero el lino indestructible y...
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