Nicolas jenson

ROSARIVO, Raúl M. - Capítulos quinto sexto, séptimo, octavo, noveno. - En su: Historia general del libro impreso. – Buenos Aires: Ediciones Áureas, 1964. - p. 67-172.

HISTORIA GENERAL DEL LIBRO IMPRESO
Raul M.Rosarivo CAPITULO QUINTO
LOS TIPÓGRAFOS AMBULANTFS - ÉXODO DE LOS TIPÓGRAFOS DE LA EDITORIAL DE FUST - FUNDIDORES DE CARACTERES TIPOGRÁFICOS Y GRANDES IMPRESORES DEL SIGLO XV -PROGRESOS EN LA CONFORMACIÓN DEL LIBRO - EXPANSIÓN DE LAS IMPRENTAS POR EUROPA - LOS "DONATOS" - LAS INDULGENCIAS - NOTAS.

CON LA CAIDA DE LA CIUDAD DE MAGUNCIA EN 1462, EL éxodo de los tipógrafos
que se encontraban al servicio de Fust y Schöeffer, antiguos socios de Gutenberg, dio como resultado inmediato la rápida expansión del arte de la imprenta. Algunos artesanos se establecieron en ciudadesalemanas y otros, llevaron la nueva técnica a Francia, Italia, Holanda y Suiza. Las pérdidas sufridas por la editorial de Maguncia fueron muy grandes y hubo de ser totalmente reconstruida. Un centenar de fundidores de tipos, punzonistas y tipógrafos provistos de prensas portátiles, recorrían los caminos estampando imágenes religiosas xilografiadas, oraciones y cartillas gramaticales. Estos impresoresnómades, siguieron trabajando esporádicamente hasta fines del siglo XV y se tiene de ellos noticias ciertas: por ejemplo, de Leonardo Acate de Basilea, que, luego de una breve estadía en Venecia, imprimió en Padua en 1473 y, al año siguiente, introdujo el arte en la ciudad de Vicenza. Se conocen de este impresor ambulante varias obras entre las cuales se destacan: Statuta Padovae y el rarísimolibro llamado Libro della Sorte de Lorenzo Spiritu. Otro impresor sin residencia fija fue Giacomino de Suico que comenzó a trabajar hacia 1484 en San Germán de Vercello, en 1486 en Chiavaso, de 1487 a 1497 en Turín y luego en Lyon y Venecia. Estos impresores del "cuatrocientos", acompañaban a los aventureros, saltimbanquis, pequeños comerciantes de baratijas y charlatanes de feria, recorriendokilómetros, por caminos a veces intransitables, bajo la lluvia y el frío, hasta llegar a un monasterio, un castillo o un palacio comunal, para estampar como diríamos hoy "al paso", libros de rezos, estatutos, ordenanzas y edictos. Bajo un pórtico, en un patio, donde fuera, armaban su prensa portátil e iniciaban su trabajo admirando a las gentes sencillas con el milagro de la multiplicación de susimpresos. Desde luego, estos tipógrafos, no tuvieron organización alguna ni fueron demasiado importantes en la difusión del libro y su comercialización ( Los muebles llamados chivaletes,
fabricados especialmente para las cajas tipográficas en las que se encuentran distribuidos los caracteres, son llamados en la jerga actual de los talleres "burros"; y esta denominación tiene por origen la costumbre delos antiguos tipógrafos ambulantes de cargar sobre asnos y mulas las dichas cajas tipográficas. Otro tanto sucede con la expresión "mármol" dado a las platinos por haber sido hechas con este material en los primeros tiempos de la imprenta. y fue posteriormente se cambió por superficies de hierro). El resultado práctico de esta

invención se produjo solamente por la acción de artesanosconstituídos en sociedad, en "editorialistas", afincados en determinadas localidades y con verdaderos talleres.

Juan Mentel o Mentelín, el mismo notario que intervino en el pleito que iniciaron Juan Riffe y Andrés Dritzehen contra Gutenberg en Estrasburgo y que habiéndose apoderado de una parte del material del taller que Gutenberg poseía en el monasterio de San Arbogasto, se hizo impresor con gransuceso. Mentelín nació en Schestadt en 1419 y murió diez años después de Gutenberg, en 1478 1. Idóneo en el arte de componer libros, mantuvo por un tiempo su nombre en la sombra, siguiendo la costumbre de otros impresores. Se le atribuyen un Terencio, un Valerio Máximo, un Virgilio y otras obras realmente bellas. Su nombre aparece por la primera vez en el comienzo del Tratado del arte de orar de san...