Nietzsche

Friedrich Nietzsche: apunte de cátedra[1]

Friedrich Nietzsche es un autor en buena medida inclasificable. Lo hemos incluido en lo que se ha denominado la filosofía de la sospecha. Lo que tiene en común Nietzsche con los otros dos maestros de la sospecha: Karl Marx y Sigmund Freud es la denuncia de la sociedad burguesa del siglo XIX y lo que ésta estimaba como bueno, verdadero y natural.Asimismo, en el plano filosófico, hemos señalado cómo estos autores objetan la supuesta transparencia de la conciencia al captar lo real. ¿Qué media nuestra relación con el mundo? Nuestro lugar en las relaciones de producción y la ideología para Marx, el inconsciente y las pulsiones parta Freud y, para Nietzsche, los valores y la voluntad.
Nietzsche nace en 1844 en Alemania, en la ciudad de Röcken ymuere en 1900 en Weimar. A los cinco años de edad, su padre fallece y él queda a cargo de su madre y de su hermana, ambas mujeres religiosas (su hermana Elisabeth incluso adultera algunos escritos del filósofo). Mucho se ha afirmado en torno a la relación de la vida del autor y su obra: se asocia a su vida cercada por la religiosidad una reacción de odio por el cristianismo, el elogio de la vidasalvaje y fuerte como reacción a su salud enfermiza, etc. Sin ánimos de detenernos en las particularidades biográficas del autor, sí señalaremos una fecha clave: 1889, año en el que Nietzsche entra en un estado de demencia y parálisis del cual nunca se recuperará, hasta su muerte en el año 1900.
La obra de Nietzsche no es una obra sistemática, pero tampoco puede considerárselo sólo un escritorde aforismos[2] Hay en sus escritos nociones que se repiten, si bien no pueden definirse como “conceptos centrales”, ya que de ese modo atentaríamos contra el espíritu mismo de Nietzsche. Sin acercarnos a un análisis exhaustivo, intentaremos echar luz sobre alguna de ellas, tales como “muerte de Dios”, “sentido de la tierra”, “voluntad de poder”, “nihilismo” y “superhombre”.
Algunos de losescritos más conocidos de Nietzsche son: “El origen de la tragedia a partir del espíritu de la música” (1872); “Humano, demasiado humano” (1877), “La Gaya ciencia” (1882), “Así habló Zarathustra” (1883), “Más allá del bien y del mal” (1886) y “Genealogía de la Moral” (1887).
En su primer obra (El origen de la tragedia), Nietzsche busca dar otra mirada acerca de la Grecia clásica, exaltando no lo“apolíneo”, sino lo “dionisíaco”. El dios griego Apolo era el dios del Sol: de la luz, de la racionalidad, la serenidad, la belleza, las artes. Dionisio simboliza la plenitud, la fecundidad de la naturaleza, lo múltiple, es el dios del vino, de los excesos. Lo dionisíaco para Nietzsche es lo que afirma la vida y lo apolíneo lo que frena la voluntad de vivir.[3] Lo apolíneo se expresa en el diálogológico y las artes plásticas, lo dionisíaco en la música y la danza. En distintos puntos de su obra, Nietzsche abraza la bandera de exaltación de lo dionisíaco.
La famosa frase de Nietzsche “Dios ha muerto” hace alusión, es necesario aclarar desde un principio, no sólo a Dios, sino a todos los valores consagrados por la tradición, todos los ideales: los valores de la religión, pero también elimperativo categórico kantiano y la fe en el progreso de la razón. Todo lo que los hombres se han puesto como meta, como fin a realizar en sus vidas, y a costa de sus vidas, lo suprasensible en cuanto ámbito (para Heidegger)[4]. Es decir, se han propuesto ideales por fuera de la vida, ideales que explican lo que somos y lo que debemos hacer; se ha considerado más real lo que se halla por fuera de nuestraexistencia sensible. Aquí encontramos la metáfora del camello, que no es otra cosa que el hombre mismo cargado de los valores que le son impuestos y que lo oprimen.
Hay en Nietzsche una resignificación del término “nihilista”: no es nihilista el que niega los valores, sino el que acepta y sostiene dichos valores establecidos por la tradición. Cuando la religión y la moral en general...