Ninguno
A las travesías de los navegantes siguieron las hazañas de los conquistadores, guerreros movidos tanto por el fervor religioso comopor la ambición de fama, poder y riquezas.
Su propósito fue propagar la fe cristiana entre los reinos indígenas, aumentar el número de súbditos del rey de España y obtener para sí mismos fama,recursos, poder y títulos nobiliarios. Con mejores armas y técnicas guerreras que los pueblos nativos de América, unos cuantos cientos de soldados lograron someter a millones de indígenas.
A su favorestuvo la audacia de capitanes como Pizarro y Cortés, y muchas veces la suerte y la habilidad los libraron de morir en manos de sus enemigos. En la conquista de México-Tenochtitlán los soldados españolestuvieron dos aliados inapreciables: el odio que muchos pueblos sentían hacia sus opresores mexicas y las enfermedades infecciosas desconocidas para los indígenas fueron las armas más mortíferas de loseuropeos. Contra la viruela y el sarampión no había defensa posible, y éstas causaron muchas más muertes que todas las acciones militares juntas. La conquista de México significó la desaparición delos antiguos señoríos prehispánicos, pero de ningún modo la destrucción total de la antigua civilización mesoamericana; los antiguos reyes indígenas y los nuevos señores españoles emparentaron entresí, y dentro de un nuevo orden político gobernaron a sus pueblos al lado de los sacerdotes cristianos, mensajeros de una nueva religión que sería compartida por todos los pobladores de la Nueva España.Además de todos los encuentros bélicos durante la conquista, hubo otras expediciones y campañas militares, tanto de Hernán Cortés como de sus capitanes, entre 1521 y 1525, en la zona central, norte ysur del territorio de la actual nación mexicana, las cuales fueron estableciendo paulatinamente los límites de la Nueva España. A partir de estos acontecimientos que modificaron drásticamente la...
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