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El picor del Wasabi

“Que nombre más…peculiar” fue el primer indicio. No recuerdo haber tenido plena consciencia del particular nombre que mis padres me habían puesto hasta ese primer día de clases. Mi profesora tildó mi nombre de “peculiar” cuando, en mi primer día de clases de básica, pidió que todos nos sentáramos y formáramos un círculo para así presentarnos. Claro, la reacción de laprofesora no fue la única, a ésta se le sumó una estruendosa risa que parecía poder escucharse hasta en la otra esquina. O bueno, para mi edad la humillación fue tal que puedo describirla con semejante exageración. Pienso que para ese entonces el día debe haber sido muy tortuoso, pues sólo tengo la imagen de muchos niños pequeños riéndose y del resto de día ni idea. No me sorprendería queinconscientemente haya bloqueado lo que ocurrió más tarde como suele hacerlo la mente con los recuerdos que causan un trauma, pero el tema no quedó zanjado ahí. No sólo fue el punto de partida para burlas que me acompañaron desde ese día hasta mi graduación de 4to medio cuando, por altavoz, pronunciaron mi nombre para entregarme el diploma, sino que fue el día en el que descubrí que algo realmente pasaba conmi nombre.
“¿Wasabi? No entiendo, ¿corresponde a su nombre real o a un apodo?” entre otras frases del mismo tipo han resultado ser de las últimas consecuencias que mi nombre ha tenido sobre mi vida. Esta última tuvo lugar cuando quise postular a un trabajo que ofrecía un cargo importante en una empresa. Como podrán imaginarse, la entrevista sólo culminó en un “Nosotros lo llamaremos, ha sido ungusto”. Y por mucho que mi experiencia como Ingeniero Civil haga peso en mi curriculum, siempre llegará mi nombre a poner el “pero” en la decisión del entrevistador. Siempre. No ha existido ocasión alguna en la que se me haya hecho fácil quedar seleccionado cuando busco empleo. Situaciones como estas siempre me llevan a recordar cómo fue que encaré a mis papás a los 9 años más o menos. Lespregunté cómo pudieron ponerme un nombre tan denigrante (con palabras de niño, claro) y les rogué con un incontenible llanto que me lo cambiaran. Ellos, a punta de risas tiernas con un suave tono comprensivo me respondían “Pero hijo, tu nombre es único. Es muy probable que no conozcas a nadie que se llame así. Además tu nombre guarda una historia. Fue por medio de un Wasabi que tu mamá y yo nos conocimos.Tu mamá trabajaba en un restaurant de comida china y entonces yo…” y así se repetía siempre la misma historia. Lo que ellos no lograban entender era que, por mucho que mi nombre tenga su origen en su romántica historia, a mí sólo terminaba por denigrarme y hacer de muchas de mis actividades cotidianas algo más tedioso, pues el mero hecho de que te pregunten cuál es tu nombre ya era algocomplicado.
Que mi nombre sea Wasabi no sólo me ha cerrado puertas y ha abierto espacios de constantes burlas, también va de la mano con un tema que me parece debería ser tratado de forma legal. Mi caso no es el único en el país. Existe el caso de un niño al que sus padres le pusieron “Jesucristo Hitler”. No sólo significa una mofa el usar dos nombres con personajes tan socialmente opuestos, sino que depor sí “Hitler” corresponde a un apellido, no a un nombre.
Y cosas así no ven límite alguno; el Registro Civil deja que nombres como estos prosperen sin aplicar el mínimo de criterio pensando en el hijo de los padres que eligieron ese nombre.
Tuve que cargar con burlas toda mi colegiatura. La más repetida era “más picante que el Wasabi”, haciendo la natural conexión entre mi nombre y el fuertepicor del condimento japonés, del cual viene mi nombre. Más grande tuve que cargar con el estigma de tener un nombre que socialmente no se ajustaba a cargos de importante renombre, haciéndome dificultoso buscar empleo. Así pues, si bien mi vida no es una miseria y he alcanzado muchas metas, me he visto muy limitado en cosas que no deberían costarme, y mucho menos por culpa de mi nombre que...