nitro

EroJ.gía, N: 4, 1990, pp. 131-141

!CONA, MADRID

LIQUENES FIJADORES DE NITROGENO ATMOSFERICO
F. BERMÚDEZ DE CASTRO', A. MüllER' y M. F. SCHMITZ'

RESUMEN
Se revisan los líquenes fijadores de nitrógeno atmosférico y su función en los ecosistemas como orga­
nismos colonizadores en zonas hostiles a los seres vivos. Se muestra su valor como indicadores de con­
taminación atmosférica. Seincluyen los primeros datos sobre la reducción de acetileno en Lobada pul­
monaria y L. scrobiculata, líquenes epifíticos sobre árboles en la zona centro de la Península Ibérica.

INTRODUCCION
Al referirse a la fijación de nitrógeno atmosférico
y a su incidencia en la producción de los ecosiste­
mas se piensa habitualmente en las plantas supe­
riores, olvidando los líquenes y Otcasasociaciones
entre bacterias o cianobacterias y algas, hongos,
musgos y helechos que desempeñan un papel im­
portame en la dinámica de los ecosistemas.
Se denomina liquen a la asociación simbiótica de
algas y hongos que se unen de forma íntima y per­
manente (FotO 1). El hongo, rnicobionte, es un 35­
carnicero en la mayoría de los casos. El alga o fi­
cobionte es casi siempre una dorofícea. pero, ave­
ces, la simbiosis se consütuye con un alga verde­
azul, que con mayor propiedad se debe llamar cia­
nohacrería, resaltando así su carácter de organis­
mo procariótica. También existen Jíquenes forma­
dos por tres simpiontes: un hongo y dos algas.
Ambos ficobiontes se encuentran separados en ca­
pas distintas o el ralo liquénico se forma con un
alga verde y un hongo, y el segundoficobionte, la
cianobacreria, se aloja en una especie de verruga
formada por las hifas que la aprisionan (Cfr.
AHMAD]IAN y HALE, 1974). E"a e"mcrora espe­

dios de Pelligera aphlOJa ceden al ralo el 95 % del
nitrógeno fijado en forma de NH t (.

LIQUENES DIAZOTROFlCüS
De las 17.000-18.000 especies de líquenes que se
consideran actualmente. el 8% contienen ciano­
bacterias (FOGG el al., 1973).Nostoc sp. es el sim­
bionte más común, aunque también se encuentran
especies de Ca/fJthrix, Scytonema y Stigo'fema como
formadoras de líquenes (MIIl.BANK, 1977). Se ha
comprobado que todas las cianobacterias ftlamen­
tosas con hererocisros (Fig. 2) fijan nitrógeno at­
mosférico y también muchas unicelulares y algu­
nos fUamemos sin heteroeistos. pero sólo las for­
mas con hererocistos yunas pocas cepas unicelu­
lares son capaces de fijar nÍcrógeno en aerobiosis,
anaerobiosis y microarofilia (GAllON, 1980; STE­
WART, 1980; GAllON y CHAPLIN, 1988). Por eso,

cializada en fijar nitrógeno atmosférico se llama ce­
falodio, del griego llEaA'l, cabeza, ya que parece
una cabecita que se coJoca sobre la superficie del
talo o dentro del mismo (Fig. 1). Por su función,
elcefalodio se puede comparar con el nódulo de
una leguminosa, ya q.ue se especializ.a en reducir
el nitrógeno molecular a amoníaco, que pasa a DU­
nir el ralo liquénico. Así, por ejemplo, los cefalo-

I

Departamento de Ecología. Facultad de Biología.

Universidad Complutense. 28040 Madrid.

Foto l. Corte de Pútigtra sp. ob~ervado al microscopio elec­
trónico de transmisión. F, ficobionee; M,micobiome.

131

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«Líquenes fijadores de nitrógeno atmosférico»

F. BERMúDEZ DE CASTRO el al.

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podemos asumir sin gran error que entre 1.300 y
1.400 especies de líquenes tienen la capacidad de
reducir el nitrógeno armosférico, autoabastecerse
de nitrógeno, crecer en lugares inhóspitos Y. por
tamo, contribuir almantenimiento de un JtaftIJ ni­
trogenado en el medio que favorezca el crecimien­
to de Otras plantas, al cede< al medio y a las plan­
tas de su entorno parte del nitrógeno fijado (MIll­
BANK, 1984).
Esta contribución a la capacidad productora del
ecosistema está frenada por el crecimiento de los
líquenes, tao lemo que en especies de Pe/ligera se
teduce a 2-3 cm al año (PETERS el al., 1986)....