No está bien ser nacionalista

Somos herederos de toda la humanidad, y el bien hay que buscarlo para todos, y no sólo para el grupito (nacional) de uno. Nuestro país no es el origen de lo más valioso quetenemos, lo verdaderamente importante (a nivel de los valores) es universal, ningún país es el dueño, ni ninguna cultura (aunque algunos pueblos tienen el mérito de haber sido losprimeros en cultivar algún valor o de haberle puesto mucha dedicación).
Las culturas tienen valores y disvalores, como todo lo humano, y por lo tanto no tienen de por sí elderecho de ser conservadas como algo que debe ser inmutable; más de una cultura es causa de que el pueblo que la ha creado y creído muera de hambre. Los que tienen los derechosson las personas, de conservar los valores de su cultura, y de cambiar sus disvalores, deshacerse de sus errores, y de asumir valores que no hayan sido percibidos ni cultivadospor sus pueblos de origen, pertenezcan a otras culturas y pueblos o no. Y por supuesto el derecho de conservar todas aquellas cosas menores y pintorescas de su cultura, comopor ejemplo las comidas, bebidas y vestimentas típicas de los distintos lugares, estilos musicales, danzas, y todo lo que ayude a sentirse ligado al propio pueblo y que noimplique un disvalor, por lo tanto sin llegar a niveles de fanatismo que impliquen rechazo a las personas que no asuman estos usos locales o adopten otros.
Y "los sagrados interesesde la nación" o de las naciones, no son más sagrados que los intereses personales, son simplemente "intereses", sólo tienen algo de "sagrados" cuando coinciden con el BIENCOMÚN, y sólo coinciden con el BIEN COMÚN cuando son justos, pero gran parte de las veces son intereses INJUSTOS, EGOÍSTAS (egoísmo grupal), OPUESTOS AL VERDADERO BIEN COMÚN.