No Te Vistas Para Cenar Guion

Páginas 42 y 43
ACTO II


Lo mismo. Dos horas después.
Cuando se levanta el telón la escena está vacía.
Se abre la puerta de la cocina y salen Robert y Suzette, mejilla con mejilla, bailando el tango de una forma exagerada. Los dos están muy borrachos. Cruzan la escena bailando el tango, rodean el sofá, y vuelven hacia la cocina, donde se encuentran cara a cara con una airada Jaquelinne. Separan, riendo estúpidamente.

Robert. ¡Una cena encantadora!
Suzette. ¡Sencillamente deliciosa!
Jacqueline (Ácidamente). Normalmente bailas así con tus familiares.
Suzette. Oh, el tío Robert se relaciona de muchas formas con sus familiares.
Robert. (Jacqueline) Y no había nadie más disponible ¿verdad? (mirando a la puerta de la cocina) ¿He oído que van ha servir el café?
Suzette. ¿Y elCoñac?
Robert. Después de ti, sobrina.
Suzette. No, después de ti, tío.
(Se abrazan de nuevo y salen bailando el tango)
Jacqueline. (Furiosa) ¡Grrrr!
(Bernard entra llevando una copa de Brandy. Mira hacia atrás a los bailarines y se ríe)
Bernard. Lo pasan bien.
Jacqueline. Parece que todo el mundo lo pasa bien ¿verdad?
Bernard. Desde luego. (Suspira feliz mientras se sienta en elsofá y alarga el vaso a Jacqueline) Ponme más brandy con soda cariño.
Jacqueline. (Cogiendo el vaso con una dulce sonrisa) desde luego, cielo. (Se va al mueble bar y le sirve más brandy).
Bernard. Una velada maravillosa.
Jacqueline. Si. A pesar de los singulares contratiempos con la cena.
Bernard. Ah, si. No se cómo la cocinera se las ha arreglado para mezclar el suflé de queso con elraspberry pavlova.
Jacqueline. Es su versión de la nouvelle cuisine, dice.
Bernard. Aún así, al final todo ha salido bien. Cómo de costumbre.
Jacqueline. ¿Tú crees? (le trae el brandy y el sifón de soda).
Bernard. (Cogiendo el vaso). Gracias. (Se afloja la corbata) ¡Uf! Me estoy acalorando con todo lo que he bebido.
Jacqueline. Bien, esto te refrescará un poco. ¿Soda?
(Bernard le alarga el vaso.Ella, deliberadamente, dirige el sifón a su camisa. El queda empapado)
Jacqueline. ¡Ay!. No me he dado cuento. Lo siento.
Bernard. (Después de una pausa larga). Se me han acabado las camisas limpias. Iré a ponerme mi traje húmedo.
(La mira preocupado y sube otra vez. Suzanne sale de la cocina. Está exhausta, despeinada, con la cara manchada, el delantal torcido, la cofia totalmente ladeada.Lleva una taza de café en la mano)
Suzanne. ¿Desea tomarse el café aquí, señora?
Jacqueline. (Cogiéndolo, dulcemente). Gracias, Suzanne. (Suzanne vuelve a la cocina)
Oh, Suzanne _ hemos tenido un pequeño accidente con el sifón. ¿Puedes limpiarlo?
Suzanne. (Demasiado cansada para discutir) Sí, señora. (Como en sueños usa su delantal para secar el sofá, dando golpecitos)
Jacqueline camina deun lado para otro, de repente da un grito de frustración.
Jacqueline.¡Ooooo!
Suzanne. Perdón.
Jacqueline. Voy a acabar bebiendo sangre, antes de que termine esta maldita velada.
Suzanne. ¿No estuvo la cena a su gusto, señora?
Jacqueline. ¡Es demasiado! Cómo he podido llegar al final sin explotar, es algo que nunca sabré.
Suzanne. ¿Qué pasa?
Jacqueline. ¡Que pasa! Que soy una imbécil. Eso eslo que pasa.
Suzanne. ¿Por qué?
Jacqueline. Por estar toda la tarde en la misma habitación que mi marido y su amante, y seguir intentando comportarme como si nada…. Debo estar loca.
Suzanne. ¿Su amante?
Jacqueline. ¡Si!
Suzanne. Usted _ ¿quiere decir que lo sabía?
Jacqueline. Por supuesto que lo sabía.
Suzanne. ¿Todo?
Jacqueline. Todo.
Suzanne. ¿Cómo?
Jacqueline. Tengo pruebas.Suzanne. ¡Oh, Dios mío!
Jacqueline. Y aún así, le he dejado que se sentase, que le sirvieses la cena, riendo, bromeando, con cara de no haber roto un plato en su vida. ¡Qué idiota soy!
Suzanne Por favor, no se altere
Jacqueline. ¡Qué no me altere! No estarías tú alterada.
Suzanne. Bueno, si pero.
Jacqueline. ¿Podrías ignorarlo, sin más?
Suzanne. No, pero.
Jacqueline. Adelante _ ¿Qué harías tú...