No Tengo Idea

En 1660, Carlos II de Inglaterra, hijo del rey que consultara tan desafortunadamente el oráculo de Virgilio y conocido por sus súbditos como el rey alegre por su amor al placer y us aborrecimiento alos asuntos de Estado, decretó que el consejo para las Plantaciones Extranjeras debían instruir a los indígenas, sirvientes y esclavos de las colonias británicas en los preceptos del cristianismo. Eldoctor Johnson, que desde la ventajosa posición de un siglo después admiraba al rey, dijo que tuvo el merito de esforzarse hasta que perdió un gran imperio por hacer lo que creyó necesario para salvarlas almas de sus súbditos. El historiador Macaulay no compartía la admiración de Johnson y afirmó que para Carlos el amor a Dios, el amor a la patria, el amor a la familia, el afecto por los amigoseran frases de la misma especie, delicados y convenientes sinónimos del amor a si mismo.
No está claro porque Carlos promulgó este decreto en el primer año de su reinado, a no ser que tal vez loconcibiera como una manera de abrir nuevos horizontes para la tolerancia religiosa a la que el parlamento se oponía. Carlos a pesar de sus tendencias pro católicas proclamaba su lealtad a la fe protestantecreía que como había enseñado LUTERO la salvación eterna dependía de la capacidad de cada persona para leer la palabra de Dios. Pero los británicos propietarios de esclavos no estaban de convencidos.Les aterraba la idea de una población negra que supiera leer y escribir y que pudieran encontrar en los libros peligrosas ideas revolucionarias. No creían a quienes a quienes argumentaban que lalectura exclusiva de la Biblia reforzaría los vínculos sociales; se daban cuenta de que si los esclavos podían leer la Biblia también leerían panfletos abolicionistas, y que incluso en las Escrituras losesclavos podían encontrar ideas incendiarias sobre rebelión y libertad.
Myers Carothers en una entrevista relataba que había aprendido las letras mientras cuidaba al hijo del propietario. que...