nomina

n la actualidad, se puede decir que diariamente la sociedad en general es dada a realizar contratos o convenios e incluso firmarlos sin prever los posibles vicios ocultos en el mismo y lasconsecuencias negativas que les puede traer, al llegar acuerdos ya sean verbales, escritos, consensuales, etc.

Cuántas veces no hemos visto en personas conocidas, en familiares o nosotros mismos que notenemos el interés de leer las cláusulas de los contratos que nos presentan por algún servicio como por ejemplo: los contratos bancarios cuyas letras son tan pequeñas que tenemos que tener a la manoun instrumento que nos permita leerlo en forma, y aun así no lo leemos.

Otra modalidad de ese tipo de irregularidades que se presentan con frecuencia es por ejemplo: cuando se celebra algúncontrato que prácticamente es unilateral pues las cláusulas protegen primordialmente a quien ofrece el servicio como en el caso de los contratos de adhesión y los contratos de crédito. Un contrato deadhesión se define, como cualquier contrato, como un acuerdo de voluntades, con la diferencia en que las cláusulas esenciales ya están dadas y la contraparte no puede negociarlas ni discutirlas.Entonces ¿en dónde queda el acuerdo de voluntades del consumidor? ¿En que es libre de firmar o no el contrato y en este sentido de recibir o no el bien o servicio?. Esto puede parecer injusto para elconsumidor ya que las reglas están puestas por el vendedor de antemano y podemos llegar al extremo de que si no firmas esas condiciones con ese proveedor te quedas sin el bien o sin el servicio quenecesitas. Piensa nada más, por ejemplo, en las compañías que prestan el servicio de televisión por cable; servicios bancarios; tiendas departamentales; línea blanca etc.

Es por lo anterior, queel presente trabajo sobre los contratos de adhesión, prenda, fianza e hipoteca; se ha realizado para analizar algunos de sus componentes y los elementos con que cuentan este tipo de contratos