Nose Que Poner

Amanecí entrelazada entre mis sabanas blancas y suaves, una mañana soleada… lentamente me estire y reaccione, mire el reloj… se me olvido por completo ir a buscar a mi padre al aeropuerto, me levante rápidamente y me puse una chaqueta, mi pijama era formal, digamos que nadie notaria que recién me había levantado. Tome mi celular y al salir vi a mi padre a punto de tocar el timbre.
Papá, losiento me quede dormida yo… -algo apurada-
Sabia que esto pasaría, no te preocupes sabes que tengo plan B… no tuve mucho que esperar para darme cuenta que no vendrías por mi, ¿me dejaras entrar?
Claro… lo siento – paso con sus maletas- Déjalas en mi habitación, ¿Quieres algo Papá?
¿Tienes Cerveza? –Saliendo de mi habitación-
Si, Ven a la cocina.
Nos servimos una lata de cerveza, comenzó a hacercalor y a pasar las horas, mi padre solo me conversaba de sus travesías del último mes. Él es un agente del FBI bueno básicamente las tantas travesías que el me cuentan, son de cómo atrapa maleantes… cosa que a mi… bueno no me interesa mucho, mi padre se puede decir que es joven y no muy cariñoso… no lo culpo, yo fui la culpable de matar al amor de su vida.
Mis padres se conocieron el penúltimoaño de colegio, por lo que él me ha contado fue amor a primera vista, una historia realmente maravillosa, de cuentos de hadas… hasta que naci yo, el parto fue complicado y mi madre no soporto, dejándolo a el con una gran responsabilidad a sus dieciséis años, se tuvo que hacer cargo de mi, solo…
Bueno, tengo que ir al trabajo y tu me acompañaras, así que quiero que te vistas – aplastando la lata consu mano-
Papá, sabes que no me gusta ir…
April, no te lo estoy pidiendo… vas a ir conmigo – levantándose bruscamente de ese deteriorado sillón-
Esta bien, voy enseguida – Le dije y me dirigí a mi habitación-
Sentí la televisión… a veces me siento tan culpable por la muerte de mi madre, siento que a mi padre le quite todo lo que realmente deseaba tener con el para siempre, no con unaadolescente de diecisiete años que tiene que llamar “hija”. Me bañe, vestí y después de unos minutos mirándome al espejo tocaron a mi puerta, sin abrirla mi padre me dijo.
¿Estas lista? –algo enfurecido y apurado-
Si – saliendo-
Vamos… Rápido que se hace tarde – yendo hacia la puerta-
¡Voy! ¡Voy! –Caminando rápidamente, mi vestimenta creo que no era muy apropiada si tienes un papa apurado sobre todocuando te hace correr con unas botas de tacón-
Nos subimos a su auto y nos dirigimos a su oficina, el como siempre tan desenfrenado en el manubrio, la adrenalina le corre por las venas igual que a mi pero el no lo sabe… con mis amigos hago carreras clandestinas y esas cosas… es mi pasión oculta por decirlo de alguna manera. Estaciono el auto en el subterráneo y rápidamente salió de el, yo porcierto lo perseguía casi saltando, al llegar nos recibió su mejor amigo de todo el servicio de investigación, Alfred.
¡Ryan! ¿Como te ha ido en Brasil? – al verlo, alegremente le pregunto. No venia a este lugar desde que tenia seis años- ¡wuau! ¿Y esta chica tan hermosa?
Alfred… es April – lo miraba como si fuera un asqueroso pervertido-
¿Bromeas? – boquiabierto-
Hola Alfred – dije contenta-Debo arreglar unas cosas – me miro seriamente- quedate aquí, ¿esta bien? –dijo mi padre-
Si Papá – Seria camine con Alfred a su oficina-
¡Wuau! Realmente no lo puedo creer, has crecido tanto April… no te veo desde los ¿cuatro años? –Sorprendido se apoyo en su escritorio-
Seis en realidad… -Le sonreí y lentamente me dirigí a una silla, me sente y volvi a la seriedad de antes-
Como pasa eltiempo, ¿Estas bien? - preocupado se paro derecho-
Mi Padre, con la seriedad de siempre... Pero no te preocupes no vine a arruinarte el día – me mordí brevemente el labio y cerré los ojos por un momento negándome a seguir hablando de el tema, de repente tocan a la puerta-
Pase – dijo Alfred-
Se abrió la puerta y entro un chico… alto, musculoso y con una piel perfectamente tostada, al verme...