Novela

He tenido encuentros de todo nivel en mi vida, con amigos, reuniones familiares, fiestas, laborales, casuales. Pero los más curiosos siempre han sido los encuentros sentimentales. Esos que… son de noche y nadie te ve… o los que vienen de vez en cuando, pasando las épocas de las ‘vacas flacas’ o aquellos que piensas que cuando tienes Todo… te salen diciendo: ‘Esteee voy a ver…’, ‘Pues mira si…tengo tiempo te aviso’ o el clásico ‘No sé…’.

Los individuos involucrados en esta historia… pues, la más perfecta creación de todos los seres de este universo… un hombre y una mujer, la dama y el caballero… la bella y la bestia.
Él una persona de regular tamaño, tez morena, mirada seria, de pocas palabras, con un toque de misterio y muy metido en su mundo. Ella por el contrario de buenacontextura, tez blanca, elocuente pero selectiva, decidida pero precavida, con un claro sentido de las cosas en su mejor punto de concentración.

Todo comenzó una noche en una reunión de unos ex compañeros de trabajo, con parrilla, cervezas, tragos y sobre todo buena música. Él no pensó que Ella iría a esa reunión…


Y así fue. Yo parado en una esquina de la sala pasándola bacán y observando elpanorama. Cuando de repente apareció Ella deslumbrante, cegándome con su 1.70 m. de estatura, buena figura, su cabello largo como el de la cola de una yegua, un rostro angelical que brillaba como el sol, producto de su tez blanca sin nada de maquillaje y con ese toque de juventud que derrochaba por doquier, además de su inevitable sonrisa que acompañaba cada palabra que emitía desde su cerebro yreproducía su boca, atrayendo como imán a las personas con su oratoria embrujante. ‘Es perfecta’ – pensé. Parecía que cada cosa que tocaba era magia en sus manos… Ella era… ¡El cielo que necesitas…! si sabía mucho o poco de Ella, creo que era así como debía ser… me hubiera gustado conocerla por primera vez esa noche, pues había ido vestida muy atractiva. Con una chompa de colores que resaltaban su buenparecido, unos jeans bien apretados y sus botas a la moda.
La salude como a cualquier extraño sin darle importancia (táctica). Ella sin embargo sonreía por todo lo alto parecía que estaba muy contenta, no paraba de hablar por celular y revisaba su teléfono al parecer por mensajes continuamente. Yo sin embargo conversaba lo necesario, sonreía cuando debía y la observaba sin que se diera cuenta.Evite por todo medio el hacerle caso y disfrutaba de la reunión con el resto de los compañeros. Sin embargo ella por su versatilidad, se mezclaba por donde podía hacer eco de toda su personalidad a lo largo de la reunión, buscando que le dijera algo, tratando que opine por lo que hablaba e involucrándome en la conversación. La verdad cuando me siento atraído por alguien actuó de forma contraria yhago caso omiso de esa persona, pero la diferencia estaba en que ya nos conocíamos… habíamos trabajado juntos durante un corto periodo tiempo atrás. En donde por algunas tareas que realizábamos en común nos llevaron a tener una tratativa netamente profesional, pero no podía evitar jamás el olvidar cada detalle de lo descrito respecto a ella líneas arriba cuando la veía.

- ¿Deseas ají? – Me dijo,con su voz de sirena y toque de tono nasal… al haberme yo servido un bocadillo.
- No gracias. – Respondí a secas.

La reunión se desenvolvió y prolongo hasta muy tarde, tanto que todos bailaron, rieron y hasta cantaron hasta muy tempranas horas. Siendo ya las 5:00 am era hora de partir. “¡Que buena fiesta!” salieron diciendo todos contentos y cada quien a su casita. Al momento de la salidaalgunos con auto y otros a pie se disiparon quedando Ella y Yo caminando en la misma dirección.
Incidentalmente se encontraron nuestras miradas y comenzó el dialogo:

- ¿Para dónde vas? – le dije.
- Pues vives por donde vivo yo, ¿no es así? – Respondió inmediatamente.

Al verla nuevamente sonrió, nunca pude interpretar esa sonrisa era una mezcla de malicia con astucia.

- Tomemos un Taxi. –...