Nuestros muchachos y el liderazgo docente

NUESTROS MUCHACHOS Y EL LIDERAZGO DOCENTE

En la cotidianidad de las relaciones entre los individuos, es normal que cada uno quiera llevar las relaciones desde donde se siente fuerte y seguro.Todas las relaciones entre humanos están mediadas por los intereses de quienes intervienen en ellas, intereses que terminan decidiendo sobre el tipo de la relación y el objeto que se pretende con ella.Cuando las relaciones se formalizan, se formalizan también unos objetivos y unas pautas de comportamiento para quienes se relacionan, ya sea por intermedio de una ley, un reglamento o manual y/oatreves de presupuestos culturales.

En las relaciones entre profesor y estudiante es frecuente que este último quiera llevar la relación hacia los predios del enfrentamiento personal, intentandoborrar diferencias entre el uno y el otro: edad, títulos, roles; tratará de llevarla a su mismo nivel o al menos a un terreno seguro para él pues el joven estudiante actual es autónomo o pretende serlo.Para las relaciones interpersonales es bueno que todos estemos en el mismo nivel, porque estamos planteando la construcción de relaciones entre seres humanos, entre iguales: relaciones democráticas.Antes de llegar a unas relaciones claramente democráticas, es necesario reconocer que hay una tendencia clara en los jóvenes a crear o hacer parte de grupos en los que la existencia de un liderazgoes imprescindible. El líder de los parches, sectas, grupos de jóvenes no es perfecto para quienes lo siguen; ven en él lo que creen necesario para tenerlo como líder: la fuerza, el arrojo u otracualidad requerida en ese grupo y en ese contexto. Cuando ese líder no demuestre esa cualidad o ésta no sea evidente para los seguidores, dejará de ser visto como tal y será el momento de reemplazarlo o elcomienzo del fin para ese grupo. No son relaciones democráticas, no pueden serlo porque la democracia es una construcción cultural, la humanidad no apareció en un ambiente democrático. Establecer...