Nueva

Rafael G. Hernández García Cano Ced. Prof. 2258086

4.2

La teoría de la relatividad situacional: La comprensión del ser humano a través de la Psicología situacional. En la sesión anterior, señalamos la necesidad de utilizar, como hilo

conductor, una ontología del hombre y una teoría de la relatividad de tiempoespacio para comprender el ser y dinamismo humanos. Las siguientes líneastrataran de explicar este hilo conductor. Lo primero que debemos señalar es que esta teoría de la relatividad de tiempo-espacio se encuentra dentro de una psicología situacional o psicología de las situaciones vitales; como ciencia que se aboca a averiguar no lo que es la vida del hombre, sino cómo vive su vida el hombre. A partir de esta psicología situacional-vital podemos analizar y explicar losconceptos básicos en que se encuadra toda la vida humana: La temporalidad y la espacialidad. A través de estos conceptos se intenta comprender el modo en que los hombres vivimos nuestra vida. Esta comprensión, se logra por medio del análisis de la

experiencia que vive el ser humano concreto, cuyos datos inmediatos son,
precisamente el tiempo y el espacio. Pero estos no deben entenderse en susdimensiones homogéneas utilizadas por nosotros para medir un lapso a través del reloj, o el lugar, topográficamente hablando, en donde se encuentra una cosa; sino el tiempo y el espacio relativos a cada hombre concreto. Es decir, el

aquí y el ahora de su experiencia particular enmarcada en situaciones vitales
que a su vez, son relaciones igualmente vitales. Relaciones que mantiene el "yo" con todolo que no es él (el "no-yo" transubjetivo). Estas relaciones se dan en un presente que tiene como supuesto un futuro. En otras palabras, la experiencia particular de este hombre concreto

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se da siempre en un presente que es paso al futuro y, por lo tanto, acción. En efecto: "La acción se circunscribe en un aquí y en un ahora. Pero este aquíy este ahora son los del sujeto que actúa; quiere decirse que no son determinables aparte de él, sin tomar cuenta de los contenidos concretos de su experiencia. En este sentido son subjetivos; pero a la vez transubjetivos, pues ninguna experiencia concreta de un aquí o de un ahora puede darse sin referencias a lo que está fuera del sujeto, a lo que trasciende su "pura" subjetividad. Cuando elactor inicia su acción, la inicia no sólo en un aquí y un ahora, sino en vista de lo que ocurre en ellos, por razón de algo concreto que en ellos se ofrece. Este algo concreto es lo que, integrado con el sujeto, constituye la situación, a la cual llamamos vital porque estando en ella se organiza la vida del actor... Vemos pues, previamente, que el aquí y el ahora deben ser despojados de todo sentidoo intención formal; deben ser cualificados siempre por aquello concreto que en ellos acontece y en ellos hacemos. Luego vemos que su misma concreción obliga metodológicamente a considerar al sujeto como ser de relaciones

vitales y a incluir en el campo de nuestras observaciones los
términos no subjetivos de tales relaciones."1 4.2.1 La trama de la existencia humana y los factores de la acción.Y ahora la cuestión siguiente es: ¿Con quién sostiene el ser humano las relaciones vitales en su aquí y en su ahora? ¿Cuál es ese no-yo transubjetivo? Todo ser humano se relaciona consigo mismo, con su prójimo (los otros hombres), con la naturaleza (entendidos aquí también todos los productos de la creación humana, al transformar la naturaleza), y con la divinidad. Por ello dice Nicol: "Endefinitiva, aquello con lo cual el hombre puede entrar en relación vital no es una muchedumbre de términos amorfa. La infinita variedad de no-yo se contrae a unas cuantas categorías definidas, que constituyen un referencial invariable... El hombre
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Nicol, Eduardo; Psicología de las situaciones vitales; F.C.E., México 1975, pág. 90.

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