nutriologa

CONDICIONES PREVIAS PARA AMAR
Hay mucha ambigüedad en el verbo amar. Gran parte
de las veces en que parece que amamos, en realidad
nos amamos. El corazón humano, es connaturalmente egoísta.
Y el camino hacia el amor está lleno de dificultades
La mayoría de las tristezas íntimas del hombre y de
sus dificultades, en las relaciones interpersonales, nacen
de la imagen, que nosotros proyectamos(de nosotros
mismos), cultivamos, alimentamos, servimos y adoramos.
He aquí la fuente principal de las frustraciones interiores
y de los enfrentamientos fraternos.
El individuo tiene una figura física: morfología, medidas
anatómicas, altura, color. .. Tiene un coeficiente
intelectual, que puede ser estudiado y definido con
un test. Tiene, además, una estructura temperamental,caracterología, equipo instintivo, campos de energía, reacciones
primarias o secundarias . . . Todo ese conjunto
está gobernado y compenetrado por una conciencia que
integra todas esas partes

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A ese conjunto le endosamos un nombre,
por ejemplo, Manuel Pérez. El nombre es una
etiqueta para la diferenciación social, pero no altera en
nada la realidad del sujeto.
A la inmensa mayoría de laspersonas no les interesa
lo que se es, sino cómo me ven. Les interesa la imagen,
más que la realidad; la mentira, más que la objetividad.
Y así, el hombre de la sociedad se lanza a participar en
esa carrera de las apariencias, en el típico juego de quién
engaña a quién, de cómo causar mejor impresión.
Para gran parte de los mortales, no existe mayor
placer que tener una imagen espléndida,proclamada y
adorada por las multitudes. Se trata, en el fondo, del
deseo idolátrico del hombre, superior a todos los demás
deseos y satisfacciones
Hemos dicho que el individuo es un conjunto de
realidades, gobernado por una conciencia.
Si esta conciencia posee la noción exacta de su conjunto,
entonces tenemos sabiduría, que significa: visión
y apreciación proporcional de la realidad
Peroen contraste con esta sabiduría
el hombre, rechazando su realidad y adhiriéndose
a la imagen aureolada e ilusoria de su realidad
pasa a confundir e identificar lo que soy
con lo que quisiera ser (imagino ser).
Vamos a suponerque yo mido un metro ochenta
centímetros. y situémonos en un plano
inclinado, de pronunciado desnivel. El sol me pega por
un costado, y por el otro mi cuerpo proyectauna
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sombra alargada de cuarenta metros.
¿Cuál es la verdad, y cuál la mentira: mi altura real o la longitud
de la sombra? ¿Dónde está la ficción, y dónde la realidad?
La preocupación por la propia imagen roba la alegría del
vivir, y origina gran parte de las dificultades fraternas,cuando se
enfrentan y se confrontan las dos imágenes: la social y la interior.
Este es elpunto de fricción, y aquí comienzan, propiamente,
los problemas y desencuentros de la fraternidad.
El individuo sufre y está deprimido porque no le
aprecian como él cree que se merece. El otro vive preocu
pado porque siente que su imagen social va perdiendo
esplendor, en comparación del brillo que tiene su imagen
de sí mismo ante sí mismo.
Anteayer, este sujeto sufrió una profunda depresiónporque le criticaron. ¿Cómo se explica una crisis tan
aguda? En realidad, hubo desproporción entre la pequeña
crítica y la tremenda depresión. La tal desproporción
fue, precisa y exactamente, la existente entre la imagen
social y la imagen inflada que el sujeto se tiene de sí
mismo.
Este otro hermano no sabe qué hacer, y cómo hacer,
para adecuar y hacer coincidir la imagen social con laimagen que tiene de sí mismo.
¿¿Cómo librarnos de esas ilusiones que nos arrastran
a tanta preocupación íntima y a tanta desventura
fraterna? No podemos vivir en esa tensión, balanceándonos
siempre entre el nombre social y los sueños imposibles.
No es posible la paz interior ni el amor fraterno,
en tales circunstancias. Gran parte de nuestras energías
son quemadas por esas preocupaciones...