Oa manola
Adoraría saber dónde hermosamente me encuentro (nótese mi sarcasmo, que nadie en este mísero clan se le antojo decirme siquiera donde estoy parada). Será cuestión de adaptarse a lainhospitalidad. Maravillosamente, esto es un hospital abandonado. Es fácil darse cuenta, mi habitación es un cuarto pequeño con una ventana. Agradecidamente tenía una incómoda cama, que solo me dejanutilizar a la hora de dormir. Lo más agradable es el balcón donde están los únicos árboles que sobreviven día a día del pésimo clima. Apoyé mi cabeza sobre mis brazos y decidí dormir un buen rato. Estasmiserables cinco horas que dejan dormir no son suficientes para Michelle.
Lentamente traté de cerrar mis ojos para disgustar mejor el sonido que produce la lluvia contra el piso, mientras merefugiaba bajo un árbol para esconderme del agua. Cuando me doy cuenta ya había anochecido, seguramente ya todos se fueron a dormir y al no verme en la cama, como obligatoriamente se debe hacer, estánbuscándome. Suspiré muy perezosamente. No tengo ni la más mínima intención de levantarme; esto de acostarse en el piso me está dando dolor demasiado fuerte en la espalda. Espero no caerme al bajar lasescaleras, mi visión está muy borrosa, demás que el suelo está mojado por la fuerte tormenta…
Mierda. Me caí.
Bueno, al menos terminé al final de las escaleras. Por suerte veo una sombra a lo lejos,...
Regístrate para leer el documento completo.