Obediencia Y Fidelidad
En Deuteronomio 6, 4 - 5, se haya el corazónmismo de la ley y dela Alianza de Dios con su pueblo. Aquí se encuentra el mandamiento supremo: Amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma y con toda la fuerza.
El solo pensamiento de queDios es Eterno, Omnipotente e Inmenso, Dios que no necesita nada de los hombres porque en si mismo lo tiene todo, tiene para nosotros tanta ternura y misericordia que lo único que nos pide es nuestroamor, debe hacer que en cada instante de nuestra vida crezca cada vez mas ese amor que nos pide y que nos manda. Es además cuando cumplimos ese mandato y únicamente entonces, cuando alcanzamos nuestrarealización completa, cuando dejamos de vivir en la idolatría (por que idolatría es nuestro egoísmo, amor al dinero, los efectos desordenados, etc., pues cualquier cosa o persona que para nosotros seamas importante que Dios, es un ídolo) y nos centramos en Dios, causa y efecto de nuestra vida.
El Señor no nos abandona en los esfuerzos que hacemos por obedecerle, solo nos pide quetengamos ánimo y valor para pasar todos los obstáculos y llegar a la tierra prometida. (Josué 1, 2 - 4).
Los mandatos del Señor no son más importantes por ser externos (escritos en piedra) sino por queÉl los va grabando en nuestro corazón a medida de nuestra docilidad y apertura a Él (Jeremías 31,31-34).
El Señor nos ofrece “Perdonarnos los pecados y no volver acordarse de ellos”. En Ezequiel...
Regístrate para leer el documento completo.