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¿QUIERES APRENDER A TOCAR EL DIDGERIDOO?
Aquí dispones de algunos consejos que seguro te son útiles.
El primero es que tengas una disposición de paciencia, relajación y positivismo. Piensa
que con el didge, las cosas son simples, como él mismo, que es simplemente un palo
hueco. Disfruta la experiencia de la respiración, la vibración y el sonido de este instrumento que desde el primer contacto es placentero. Sólo su tacto, su textura y su
forma ya son seductoras.
No tengas prisa. Esto hará que aprendas mejor y más rápido.
Aprovecha el tiempo que le dediques para concentrarte en qué está pasando dentro de
tí. Observa, siente, relájate,... y vigila tu postura. Que tu espalda esté recta y para ello es aconsejable tocar de frente en lugar de hacerlo de lado, es decir, que el orificio de la
boquilla esté centrado con respecto a tus labios. De este modo evitarás posturas
inadecuadas más fácilmente.
Comienza a practicar la respiración diafragmática, que consiste en usar principalmente
la parte inferior de los pulmones, de manera que al inspirar se hincha un poco el
abdomen, mientras que la zona clavicular permanece más relajada. No es necesario decir que recibir algunas clases hará siempre que tu aprendizaje sea
más rápido y eficaz, pero si quieres empezar hoy mismo, puedes practicar estas
sugerencias:
a) DRONE o SONIDO BASE
El drone es el sonido al que tienes que tratar de llegar la primera vez y para ello debes hacer vibrar tus labios dentro de la boquilla del didgeridoo. Una vez que contactas con
él la vibración tiende a establecerse momentáneamente. Es como que el movimiento de
los labios soltando aire en esa posición tiende a mantenerse por sí solo.
¿Recuerdas cuando de pequeñ@ imitabas el sonido del motor de un coche? ʺBRRRRRR,
BRRRR, BRRRRR,...ʺ pues para aprender a tocar el didge puedes empezar por ahí. Relájate y aprieta suavemente los labios contra la boquilla del didge, haciendo que
salga el aire de los pulmones. No debe haber escape de aire fuera de la boquilla y
observa, de entrada, que la lengua no participa en esta vibración; está relajada. No te
tenses intentando relajarte.
El drone es el sonido resultante de la vibración de los labios dentro de la boquilla y
debe producirse de manera natural. Cuando conectas con él te darás cuenta que él solo se mantiene mietras expulsas el aire.
De todos modos, si crees que no estás haciendo el drone como crees que deberías, o
podrías hacerlo, no dejes de observar los distintos sonidos que aparecen durante tu
búsqueda. El didge no tiene agujeros para hacer distintas notas, pero es muy sensible a
los cambios de presión que ejercemos en los labios y al amplificarse en el instrumento se convierten en recursos sonoros muy interesantes a la hora de ir sustituyendo la
monotonía inicial por lo que será tu estilo propio.
En general hay que practicar en profundidad este sonido inicial, sentir el contacto con
el didge, conocer su reacción a tus movimientos internos, ponerlo a prueba. Cada
didge es distinto, y en boca de cada un@ esta diferencia se acentúa. Investiga, juega con él... y deja salir en este juego tu parte más ʺlunáticaʺ.
b) SONIDO DE TROMPETA, ZUP, HORN
En síntesis, es la misma técnica que para hacer el drone, pero con algún cambio. El
sonido es más agudo y a veces recuerda la bocina de un barco. Para llegar a él debes
modificar la postura de tus labios, que se comprimen un poco más el uno contra el otro y también el aire sale con un poco más de presión. Prueba a contraer los mofletes hacia
tí. Te puede servir como referencia para encontrar este sonido la postura de labios que
haces para pronunciar la ʺPʺ. Coloca tus labios como para pronunciar la ʺpʺ y empuja el
aire hacia afuera.
Puedes buscarlo haciendo que tu labio inferior se coloque algo más hacia dentro que el
labio superior. ...
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