obra ollantay
OLLANTA
, conmovido.)
OLLANTA.- ¡Ah Ollanta! ¡Así eres correspondido! Tú que has sido el vencedor detantas naciones; tú que tanto has servido. ¡Ay, Cusi-Ccoyllur! ¡Esposa mía! ¡Ahora tehe perdido para siempre! ¡Ya no existes para mí! ¡Ay princesa! ¡Ay paloma!... ¡Ah Cuzco!,¡hermoso pueblo! Desde hoy en adelante he de ser tu implacable enemigo: romperé tu pecho sin piedad; rasgaréen mil pedazos tu corazón; les daré de comer a los cóndores a eseInca, a ese tirano. Alistaré mis antis a millares, les repartiré mis armas y me verás estallar como la tempestad sobre la cima deSacsa-Huamán. ¡El fuego se levantará allí y dormirásen la sangre! Tú, Inca, estarás a mis pies, y verás entonces si tengo pocos yuncas y sialcanzo tu cuello. ¿Todavía me dirás: «no te doy a mi hija»? ¿Serástan arrojado parahablarme? ¡Ya no he de ser tan insensato para pedírtela postrado a tus pies! Yo debo ser entonces el Inca, ya lo sabes todo; así ha de suceder muy pronto...
ESCENA X
SalePIQUI-CHAQUI
.
OLLANTA.- Ve, Piqui-Chaqui, y dile a Cusi Ccoyllur, que esta noche me aguarde.PIQUI-CHAQUI.- Fui ayer por la tarde y encontré su palacio abandonado. Preguntéy nadie me dio razón de ella.Todas las puertas estaban cerradas. Nadie moraba allí y ni unsolo perrito había.OLLANTA.- ¿Y sus domésticos?PIQUI-CHAQUI.- Hasta los ratones habían huido no hallando qué comer; sólo los búhos sentadosallí dejaban oír su canto lúgubre...OLLANTA.- Tal vez su padre se la ha llevado a esconderla en su palacio.PIQUI-CHAQUI.- Quién sabe si la ha ahorcado y ha abandonado a la madre.OLLANTA.- ¿Nadie hapreguntado ayer por mí?PIQUI-CHAQUI.- Como cosa de mil hombres, te buscan para prenderte.OLLANTA.- Sublevaré entonces toda mi provincia: mi diestra demolerá todo; mis pies y mis manos son mi maccana; mimaza arrasará sin dejar nada.
PIQUI-CHAQUI.- Sí, yo también he de pisotear a ese hombre y aun le he de quemar.OLLANTA.- ¿Qué hombre es ése?PIQUI-CHAQUI.- Digo que Orcco-Huarancca, el que ha...
Regístrate para leer el documento completo.