Obras Paralelas

REBELIÓN PERFECTA
Han sonado ya los timbres. La orden de desalojar el INSA ha sido dada. Los estudiantes están minuciosamente entrenados para la emergencia. No hay tiempo que perder.
De inmediato los movimientos se hacen sentir. Las largas filas se mueven con sincronía impecable, como siempre. Ni si quiera el peligro anunciado por los timbres altera la compostura de la operación. Todo el mundoobedece.
Bueno, todo el mundo menos tu y yo.
Estamos refugiados acá en el chalet de la “princess”, lo que no tiene nada que ver con lo que debíamos hacer. Como nadie sabe que estamos aquí, nadie sabrá que somos los únicos que desobedecen la orden. Si alguien lo supiera, la regamos.
Los timbres continúan sonando. Nosotros seguimos tranquilamente instalados en nuestro mundo propio, sin temor, comosi estuviésemos protegidos de todas las catastróficas contingencias.
Empieza el bombardeo, la institución es atacada, se destruye todo a nuestro alrededor pero hasta nuestro refugio no llegan las bombas, pero el ataque continúa hasta que por fin deja de sentirse. Nos miramos, sonreímos. Estamos a salvo.
Cuando ya no hay nada que temer, salimos. Todo está destruido. No hay rastros de alumnos. Habráque reconstruir todo el INSA o construirlo en otra parte. Nunca volveremos a ser los mismos. En todo caso, tú y yo volveremos a levantar nuestro pequeño mundo ideal. Al fin de cuentas, somos las hormigas de siempre. Y nosotros, la pareja rebeldes, damos testimonio. Un ejemplo de la rebelión perfecta.






EL SÉPTIMO REY
En la Selva amazónica, allí se encontraba este hombre llamado Teodoro. Élvivía en la selva reconocía los sonidos de aquel lugar, sabía entender el aroma y colores de las estaciones e incluso podía comunicarse con los animales, los cuales no le hacían ningún daño, al contrario, los animales hasta los más feroces eran amigables con Teodoro.
Teodoro se había construido una chocita de troncos y otros materiales, y para mantener el calor le puso pieles de animales queanteriormente le habían servido de alimento.
Para Teodoro los animales no eran amenazas, al contrario, él los veía como vecinos inteligentes. Algunos animales llegaban a comer las sobras de Teo y a cambio le brindaban protección. Los tigres y los osos eran los que siempre estaban con él.
Una noche muy fría, Teodoro dijo a los tigres que era un bueno momento para cazar, los tigres dispuestos a obedeceriban de camino, cuando de pronto regresaron muy agitados, tal vez asustados ya que escucharon pasos de humanos que iban hacia la choza de Teodoro, uno de los tigres que se llamaba Milsen avisó rápidamente a Teo lo que habían escuchado y entonces Teodoro se dirigió afuera para asegurarse de lo que sucedía y poner fin a los malvados.
Comenzó a caminar y escuchó los pasos y pudo localizar dónde seescuchaban los pasos, era cerca del río, por unos árboles y por fin los logró ver pero era una persona encapuchada de negro y no se podía distinguir su rostro, la persona empezó a pedir ayuda y luego Teodoro se acercó y le quitó la capa, entonces descubrió que solo era una muchacha de piel blanca y ojos azules, muy hermosa, se veía tan frágil que no hizo más que llevarla a su choza y ofrecer suayuda, ella le dijo que necesitaba su ayuda, que los malos la perseguían y que estaba herida.
Entonces Teo le ayudó a curarla y cuando se hubo tranquilizado un poco pudo explicarle:
-Los rebeldes de mi país quieren el trono, y para eso quieren matarme.
-¿Tú estás en el trono? ¿Eres la princesa?
-No, yo soy la reina de mi país Manjipoor. Soy la Reina Alexandra. ¿Cuál es tu nombre amable caballero?-Su majestad, es un placer. Mi nombre es Teodoro. Es tan sorprendente que seas tan valiente, siendo la reina andes sola en este lugar.
Le hizo una reverencia y le dio un poco del conejo asado que él iba a cenar, entonces el la mantuvo escondida esa noche para que no la encuentren. Ella siguió contando la historia y le explicó que los malos la habían secuestrado pero que uno de ellos le había...