Ocultar La Realidad

Hay Que Ir Hasta El Fondo De Lo Que Sentimos
Por: Diego Salgar

Mucho hemos oído y mucho hemos hablado del horroroso asesinato del bebé. Pero hasta el momento no he visto que nadie se hayaacercado al problema real.

El primer impacto hace pensar en la personalidad enferma de alguien que es capaz de tal violencia. Y el análisis se desarrolla en el conocido lugar de la decadencia social denuestro siglo. Ahí estamos otra vez cómodos, porque nos sabemos de memoria las opiniones y hemos acumulado una gran variedad de ejemplos.

Tal vez la primera reacción sea pensar en la pena de muerte,o al menos en la cadena perpetua para alguien que es capaz de un acto de tal perversión. Y nuevamente llegamos a un terreno sabido, al que le aplican la mayoría de los ejemplos de nuestro repertorio.Uno puede alejarse un poco de la coyuntura y preguntarse por qué los medios están cubriendo este caso tan de cerca. Por qué no se limitaron, como hacen la mayoría de las veces que pasan unanoticia de este tipo, a 5 segundos de televisión, una línea de prensa y un comentario rápido en radio. Ignoraba qué había detrás de esta estrategia, pero una amiga me ayudó a entender y lo evidencié al verlas noticias a las que estoy suscrito.

En pocos días hemos llegado a saber infinidad de detalles de la familia, de las condiciones del barrio, de la personalidad del bebé, en fin, lo hemos hechoparte de nuestros afectos. Al punto de la indignación cuando, en algún momento, la madre dijo que perdonaba al papá (creo que todavía no se sabía que él lo había matado). Pues bien, un nuevo evento dela noticia aparecía seguido de otro encabezado del Tiempo.com que reforzaba la tesis de mi amigo: “Radicado proyecto para establecer cadena perpetua a los abusadores de menores”. Una tragedia tandolorosa es usada con gran habilidad para generar un ambiente positivo para aprobar la cadena perpetua. Es un tema demasiado delicado para que se discuta desde la emotividad y la pasión, en vez de usar...