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La creación de ‘niños medicamento’ es una instrumentalización del ser humano
Posted on 31 mayo 2004
La creación de ‘niños medicamento’ es una instrumentalización del ser humano
La Comisión Nacional de Reproducción Asistida ha dado el visto bueno a la «selección de embriones con fines terapéuticos», es decir, la creación de «bebés medicamento». ¿Es lícito engendrar un ser humano con el únicofin de curar a otro? ¿Qué destino se le da a los embriones ‘sobrantes’?
La escena es de las que conmoverían a una piedra: un matrimonio impotente ante la enfermedad mortal de un hijo. Sólo un transplante de médula ósea puede salvarle. Para asegurar la compatibilidad y evitar el rechazo, el donante tendría que ser un hermano. ¿Quién podría negarles la posibilidad de recurrir a técnicas dereproducción asistida para seleccionar un embrión libre de la enfermedad que, con su nacimiento, podría salvar la vida del niño enfermo?
La creación de ‘niños medicamento’ o ‘niños salvadores’ consiste en diseñar seres humanos a partir de embriones sanos ‘hermanos’ de un niño con una enfermedad congénita, hereditaria o no, para usar sus células como tratamiento.
El procedimiento consiste en producir unalto número de embriones (entre 12 y 20) y, en una primera fase, se seleccionan aquellos que estén libres de la enfermedad que se pretende curar. En una segunda fase, se seleccionan, entre los embriones sanos, aquellos que resulten compatibles con el sujeto, es decir, aquellos cuyas células puedan usarse en el tratamiento del niño enfermo.
Una ley sin uñas y dientes
En principio, la legislaciónobliga a los padres a que se hagan cargo de los embriones no empleados en la generación del ‘niño medicamento’ para engendrarlos o cederlos para terapias de reproducción asistida. Sin embargo, la ley es en este caso “papel mojado, una ley sin uñas y dientes”, en opinión del doctor Gonzalo Herranz, presidente de la Comisión de Ética de la Investigación Biomédica de la Clínica Universitaria deNavarra. Además, recuerda el Dr. Herranz, el “consentimiento informado es siempre retractable, hasta el último minuto”, de modo que aun cuando se dotara a la ley de recursos sería imposible imponer a los padres la obligación de ‘cargar’ con los embriones sobrantes.
La Iglesia se opone frontalmente a esta instrumentalización del ser humano como se recoge en la Instrucción Donum Vitae, que prohíbeasimismo las técnicas de fecundación ‘in vitro’. “El origen del ser humano -afirma el documento- es el resultado de la procreación ligada a la unión no solamente biológica, sino también espiritual de los padres unidos por el vínculo del matrimonio. Una fecundación obtenida fuera del cuerpo de los esposos queda privada, por esa razón, de los significados y de los valores que se expresan mediante ellenguaje del cuerpo, en la unión de las personas humanas”.
Por tanto, el acto de la procreación sin la expresión corporal priva de la comunicación interpersonal que debe existir entre los esposos y no existirá la plenitud y la totalidad del don de las dos personas.Se sustituye el gesto corporal por la técnica, reduciendo el valor del acto conyugal a un valor meramente técnico; es decir, se empobrece ydegrada el acto de la procreación.
El hombre como medio
Para el Dr. Herranz, en el caso de los “niños salvadores” estamos ante un caso más de “sentimentalismo ético”, por el que se elude la reflexión racional mediante una apelación al sentimiento con escenas manipulativas. “Es indecente sacrificar embriones para obtener el tratamiento que cure a otro”, señala el Dr. Herranz. “Mi vida no valemás que la de un embrión”. Como en toda actividad artificial, se “emula” e “imita” lo que acontece en la naturaleza, pero a costa de olvidar que el hombre no se reduce a su componente biológico, sobre todo cuando éste se limita a las modalidades reproductivas que han caracterizado sólo a los organismos más simples y menos evolucionados desde el punto de vista biológico.
Se alimenta la idea de que...