Operación Historiográfica

La operación historiográfica
En historia todo sistema de pensamiento se refiere a lugares sociales, económicos, culturales, etc. Ese tipo de dicotomía entre lo que hace y lo que diría, serviría por lo demás a la ideología reinante protegiéndola de la práctica efectiva. Condenaría además las experiencias del historiador a un sonambulismo teórico. Más aun cuando en historia como en todo lo demás,una práctica sin teoría cae necesariamente, tarde o en todo lo demás, una práctica sin teoría cae necesariamente, tarde o temprano, en el dogmatismo de valores eternos.

La escritura histórica se construye en función de una institución cuya organización parece invertir: obedece, en efecto a reglas propias que exigen ser examinadas en sí mismas.

La historia objetiva conservaba, por lo demás,con esta idea de una verdad. Los hermosos días del positivismo nos remitía a una circulación de los conceptos, es decir a los desplazamientos, que a lo largo de todo aquel siglo habían trasportado a las categorías filosóficas por los subalternos de la historia, de la exegesis o de la sociología.

Michel Foucault precisa que la subjetividad o el pensamiento no existe, además agrega la autonomíadel lugar teórico donde se desarrollan las técnicas de una disciplina y los conflictos sociales en el examen de una estructura epistemológica de la historia.

El nacimiento de las disciplinas esta siempre ligado a la creación de grupos. No se trata de ya unidad social destinada a convertirse en la ciencia, a partir de los observadores del hombre del siglo XVIII hasta la creación de la sextasección de la escuela practica de estudios por la escuela de los Annales, pasando por las facultades del siglo XIX cada disciplina conserva su ambivalencia de ser la ley de un grupo y la ley de una investigación científica.

Un poder que tiene su lógica; un lugar sostenido y mantenido por una disciplina que se desarrolla en obras sucesivas, etc. El discurso científico que no habla de su relacióncon el cuerpo social no puede dar origen a una practica, deja de ser científico y esto es muy importante para el historiador, pues en esta relación con el cuerpo social esta precisamente el objetivo de la historia. No podríamos dejar de tratarla sin poner en juicio al mismo discurso historiográfico. De este modo se revela la prioridad del discurso histórico.

Además se señala que el público no esel verdadero destinatario del libro de historia, una obra es menos apreciada por sus compradores que por sus pares y los colegas que la juzgan según criterios científicos diferentes a los del público, y es decisivos para el autor desde el momento en que pretende hacer obra historiográfica. Existen leyes del medio que circunscriben posibilidades cuyo contenido varia, pero no varía la presión queejercen.

Un estudio particular será definido por la relación que mantenga con otros contemporáneos, con un estado de la cuestión, con las problemáticas explotadas por el grupo y los puntos estratégicos que se van formulando junto con los avances y las desviaciones determinados o vueltos posibles en lo referente a una investigación en curso. El libro o el artículo de historia son a la vez unresultado y un síntoma del grupo que funciona como un laboratorio. Como el automóvil producido por una fábrica, el estudio se vincula al complejo de una fabricación específica y colectiva y no es tanto el afecto de una filosofía personal o la resurrección de una realidad pasada. Es El producto de un lugar.

Desde el acopio de los documentos hasta la redacción del libro, la práctica histórica dependesiempre de la estructura de la sociedad.

Lucien Febvre declara que quiere quitarle a la historia el habito de las querellas de antaño y sacarla, por ejemplo, de las categorías impuestas por las guerras entre católicos y protestantes.

Un cambio de la sociedad permite al historiador tomar otra distancia en la relación con lo que se convierte globalmente en pasado.

Lucien Febvre procede...