Opinion
La directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar ICBF, Beatriz Londoño, denuncia a todas las 9297 empresas entre públicasy privadas que no han pagado los impuestos parafiscales, y lo peor de todo es que la deuda esta en unos 180 mil millones de pesos, de los cuales un gran porcentaje pertenece a las 1221entidades del sector público.
Lo más lamentable del caso es que el primer perjudicado no es el ICBF; son los 180 millones de niños que dependen de esos ingresos que son repartidos entreel bienestar y hogares comunitarios.
Entre las cosas más absurdas que se pueden ver en este caso es que las propias empresas del gobierno estén faltando a esta obligación legal y moral. Encuanto a las empresas privadas se ha tomado la determinación que todas aquellas que tengan alguna clase de relación con empresas del Estado se les congelaran contratos mientras no sepongan al día con la deuda.
Por otro lado la directora también piensa acudir a su arsenal jurídico para aquellas empresas que se presiente harán caso omiso del comunicado hecho para lacancelación oportuna del atraso con este parafiscal.
Comentario.
Las empresas Colombianas están de una u otra forma atentando contra la integridad de la infancia menos favorecida delpaís. No se dan cuenta que al no pagar este impuesto parafiscal están bajando la calidad y el bienestar de todos aquellos jardines del ICBF donde miles de niños muy pequeños son cuidados yenseñados mientras sus padres trabajan para poder darles lo necesario para una vida relativamente digna.
Lo más aterrador de todo es que las propias empresas del Estado estén incumpliendocon esta ley; ya que estas por ser de la misma naturaleza deberían dar ejemplo y no contribuir a esta desconsideración de tan alto pecado, como lo es perjudicar a la infancia colombiana.
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