opiniones

PADRE DAVID SAMANIEGO

Te hace feliz tu mujer?
“En cierta ocasión preguntaron a un hombre: ¿verdaderamente te hace feliz tu mujer? En ese momento la esposa levantó ligeramente el cuello en señal de seguridad, sabía que su esposo diría que sí, pues él jamás se había quejado durante su matrimonio; sin embargo, el esposo respondió con un rotundo: No, no me hace feliz. Y ante el asombro de lamujer, él continuó: No me hace feliz, ¡yo soy feliz!... El que yo sea feliz o no, eso no depende de ella, sino de mí.

“Yo soy la única persona de quien depende mi felicidad. Yo determino ser feliz en cada situación y en cada momento de mi vida, pues si mi felicidad dependiera de alguna persona, cosa o circunstancia sobre la faz de esta tierra, yo estaría en serios problemas. Todo lo que existe enesta vida, cambia continuamente: el ser humano, las riquezas, mi cuerpo, el clima, los placeres, etcétera… A través de toda mi vida, he aprendido algo: sencillamente yo decido ser feliz y lo demás lo llamo experiencias: amar, perdonar, ayudar, comprender, aceptar, escuchar, consolar.

“Hay gente que dice: no puedo ser feliz porque estoy enfermo, porque no tengo dinero, porque hace mucho calor,porque alguien me insultó, porque alguien ha dejado de amarme, porque alguien no me valoró. Pero lo que no sabes es que puedes ser feliz aunque estés enfermo, aunque haga calor, aunque no tengas dinero, aunque alguien te haya insultado, aunque alguien no te amó, o no te haya valorado. La vida es como andar en bicicleta, te caes solo si dejas de pedalear. Ser feliz es una actitud ante la vida…”.(Autor anónimo).

Hace ya algunos años, un canal de la televisión guayaquileña iniciaba su programación con las palabras de un reconocido motivador. Era una arenga matinal, buena para chicos y grandes, más o menos en estos términos: “Hoy es el mejor día de tu vida, vívelo intensamente, no desperdicies un minuto, vive con alegría; contágiala a los demás; respira profundamente y siente la dicha deestar vivo. Hoy es el mejor día de tu vida…”. Estas palabras, casi al despertar, eran una inyección de optimismo para una jornada de intenso trabajo. Ese canal, por desgracia, perdió su libertad, fue secuestrado; nadie ha pagado aún por su rescate.

La felicidad no conoce fronteras, ni requiere de visas ni pasaportes, se queda donde la llaman y se entrega a quien la persigue con insistencia. Paraser felices no se requiere de títulos académicos; no está dicho que los pehachedés sean necesariamente felices por ser tales, si bien algunos de entre ellos creen que el Sumak Kawsay es la puerta de ingreso a la felicidad. La felicidad no se la puede comprar porque nadie la vende, es un producto de elaboración casera, de rúbrica personal. No existen católicos felices si cada uno no es feliz.Alguien puede estar en desacuerdo con el Gobierno central, pero no debe agradecerlo por ser feliz ni culparlo de ser infeliz. Yo genero mi felicidad o construyo mi infelicidad.




Bachilleres 2011
Cuatro años es un lapso importante que puede marcar una vida. Ustedes, jóvenes bachilleres, son hijos de una época que la historia denominará “La revolución ciudadana”. En los cuatro años de gobiernodel presidente Rafael Correa, Ecuador ha presenciado cambios importantes e intentos de transformaciones que marcan una diferencia notoria con algunos lustros de nuestra convulsionada historia reciente. Las circunstancias que vivimos influyen poderosamente en nuestras vidas.

Ustedes han oído que el mundo vive hoy la época del conocimiento; que el capital más grande que una persona puede poseeres el conocimiento y no el dinero, como se solía decir. El conocimiento, a su vez, es fuente inagotable de bienes materiales y un recurso que no se agota en las crisis mundiales. El conocimiento, en sus inicios, no es una golosina ni un néctar que busquemos devorarlo con avidez por su sabor exquisito; todo lo contrario, los caminos hacia el mundo del conocer son ásperos, llenos de dificultades,...