Oppe Pasquet

El Sábado, 24 de octubre de 2009 a las 21:41
A manera de justificación de una nota extensa y árida

El 25 de Octubre, conjuntamente con las elecciones nacionales, se
plebiscitará una enmienda constitucional por la que se anula la Ley No.
15.848, de 22 de Diciembre de 1986, llamada “de Caducidad de la Pretensión
Punitiva del Estado”.
Los partidarios de la anulación han desarrollado extensay reiteradamente
sus argumentos e incluso están realizando, en estos días previos al acto
electoral, una campaña publicitaria a favor de la enmienda propuesta.
Quienes se oponen a la anulación, en cambio, no han hecho el mismo esfuerzo
para exponer y explicar sus razones.
Convencido de la importancia del asunto desde la perspectiva de la plena
vigencia del Estado de Derecho en el Uruguay,desarrollo a continuación las
razones por las que no votaré a favor de la anulación propuesta.
El tema puede resultar árido para algunos lectores, pues su naturaleza
obliga a emplear conceptos jurídicos para tratarlo con propiedad. Las
consideraciones que siguen no tienen tampoco la brevedad de una nota
periodística, pues la exposición cabal de ciertos argumentos requiere más
espacio que ése.Pese a todo ello me he decidido a difundirlas, porque no
todo puede reducirse a eslóganes, ni a lo poco que puede decirse en los
segundos o minutos de una entrevista radial o televisiva. El ejercicio a
conciencia de los derechos y deberes de la ciudadanía, reclama a veces
algún tiempo más. Por ser candidato a ocupar cargos electivos, me he sentido
en el deber de poner por escrito lo que opinosobre este asunto. Desde ya,
mi agradecimiento a quienes se tomen el trabajo de leer lo que sigue.


Ope Pasquet

Octubre, 2009



CONTRA LA ANULACIÓN DE LA LEY DE CADUCIDAD

1) Estoy en contra de la anulación de la Ley de Caducidad porque pienso que
en un Estado de Derecho, las amnistías deben ser irrevocables.
Deben serlo, para que la situación de las personas frente a la leypenal no
pueda ser modificada en su perjuicio por decisiones políticas. Desde la
Revolución Francesa, es inaceptable que la libertad y la seguridad de las
personas dependan de la voluntad del soberano, aunque el soberano sea el
pueblo.

1.1. El derecho a la seguridad es un derecho humano fundamental, reconocido
tanto por la Constitución uruguaya (artículo 7) como por los principalesinstrumentos internacionales de protección de los Derechos Humanos
(Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, Convención Americana
sobre Derechos Humanos o “Pacto de San José de Costa Rica” de 1969, etc.).
La seguridad no es un fin en sí misma, sino un medio para proteger otros
derechos, como el derecho a la vida y a la integridad física, el derecho de
propiedad, el derecho a la libertadpersonal, etc. De poco valdría el
reconocimiento de estos y otros derechos sustanciales, si el Estado no
estuviese obligado a proteger a las personas en el goce de ellos. Para
proteger el derecho a la vida, por ejemplo, la Constitución prohíbe la
aplicación de la pena de muerte (artículo 26). Para proteger el derecho de
propiedad, se establece que a nadie se le podrá expropiar la suya sino enlos casos de necesidad o utilidad públicas declarados por ley y mediante el
pago de una justa y previa compensación (artículo 32). Para proteger la
libertad personal se dispone que nadie podrá ser preso sino infraganti
delito o, habiendo semiplena prueba de él, por orden escrita de juez
competente, etc. (artículo 15). Todas estas garantías constitucionales de
los derechos que la mismaConstitución consagra, hacen efectivo el derecho a
la seguridad.
Sin seguridad, los demás derechos poco valen, porque no se puede gozar
cabalmente de ellos si se está expuesto a perderlos en cualquier momento,
por decisión ajena. Las personas necesitan saber a qué atenerse para vivir
con dignidad y tranquilidad; necesitan saber que el gobernante de turno no
las puede privar a su arbitrio de su...