ORACION ANTE EL CRUCIFIJO


ORACIÓN ANTE EL CRUCIFIJO
TEXTO ITALIANO
TEXTO LATINO
TRADUCCIÓN ESPAÑOLA
Altissimo glorioso Dio,
Summe, gloriose Deus,
Altísimo, glorioso Dios,
illumina le tenebre de lo core mio
Et dame fede dricta, sperana e caritade perfecta,
senno et cognoscemento Signore,
illumina tenebras cordis mei
Et da mihi fidem rectam, spem certam et caritatem perfectam,
sensum et cognitionem, Domine,
iluminalas tinieblas de mi corazón
y dame fe recta, esperanza cierta y caridad perfecta,
sentido y conocimiento, Señor,
Che faa lo tuo santo e verace commandamento.
Ut faciam tuum sanctum et verax mandatum
Para que haga tu santo y veraz mandato.

CARACTERIZACIÓN
Si se desea conocer la piedad de Francisco de Asís, indubitablemente, hemos de referirnos a esta oración, la cual, sin lugar a dudas, es unaexpresión del santo en un momento crucial de su vida: el camino de su conversión. Además, esta oración, si bien es concisa en su expresión, es muy densa en su contenido, ya que presenta un camino directo de relación con el Padre y con los demás.
Ahora bien, es presentada la oración en sus tres versiones: el texto en el italiano primitivo (según la versión que se encuentra en el MsLittle de laBiblioteca Bodlain de Oxford)1, el texto latino y la traducción española, ello con el fin de posibilitar una lectura analítica de la oración en sus tres versiones.

FECHA DE COMPOSICIÓN
Cada que, por piedad de nuestra espiritualidad, nos acercamos a esta oración, al instante llega a nuestra mente aquel tiempo en que Francisco, un joven apasionado por la nobleza y la guerra, se devuelve del camino haciala lucha motivado por un sueño, e inicia un camino diferente que, si bien sentía cambios en su vida, como muchos jóvenes incluso de hoy, veía el horizonte de su vida en la infinitud del universo. Así pues, no es del todo erróneo pensar en Francisco, un joven de Asís, caminando por los prados, un poco con la cabeza inclinada, a veces orando, otras tantas pensando y, sin duda alguna, buscando algoque llenara su corazón.
Es pues este el contexto de Francisco, un joven en silencio, oración y meditación cuando, en medio de sus caminatas, se encuentra con una capillita, en ruinas, llamada de san Damián; y, en un instante, se siente inspirado por el Espíritu (Cf LM II, 1) y entra en ella. El paisaje es desolador, una capilla en ruinas, quizá como su vida, al borde del camino, pero con algodentro de ella: una imagen de Jesús crucificado. Así pues, Francisco orando ante él, mirándolo con sus ojos llenos de lágrimas (cita anterior) oyó una voz con sus oídos “corporales”, en palabras de san Buenaventura, que le dijo: Francisco, vete y repara mi casa, que como vez, está a punto de arruinarse toda ella.
No es nuestra intención, en este momento, adentrarnos en las palabras del crucifijo,sino en la respuesta de Francisco. San Buenaventura no nos da alguna expresión de Francisco, sin embargo, nos dice que se dispone a obedecer. Pero, la segunda vida de Tomás de Celano, escrita entre 1246 -- 1247, dice que “ad obediendum se parat, totum se colligit ad mandatum2” (2C 10,6) y nos trae un dato interesante: el término usado por el celanense para indicar la orden es mandatum, que coincidecon la versión latina de la oración frente al crucifijo.
Con lo que precede, podemos ir concluyendo varios asuntos: no hay registro de que Francisco dijera al pie de la letra la oración como la sabemos hoy, pero podemos afirmar que existió el mandato y que oró por cumplirlo. De la misma manera, gracias a los hagiógrafos, podemos intuir que, si bien esta oración no fue compuesta en ese instante,sí, por ciertos términos usados, se fue construyendo en el camino de conversión san franciscano.
Así pues, se tiene el año 1206 como el inicio de la conversión de Francisco, entonces, de la misma manera, podemos situar esta oración desde este mismo año, llevándonos, pues, a reconocer que nos encontramos frente a uno de los más antiguos escritos del santo.
ESTRUCTURA
Gramaticalmente, este texto...