Oratoria a juarez
Honorable jurado calificado, estimados Maestros, Compañeros que cultivan el arte de la elocuencia, Señoras y Señores, con profunda admiración expondré anteustedes esto que he titulado:
“Juárez: Ejemplo que perdura para ésta y nuevas generaciones”
De cuna sumamente humilde y huérfano de padres, de niño se vió obligado a ganar el sustento diario cuidandoovejas en su tierra natal.
Desde la infancia da muestras de su clara inteligencia y las vicisitudes que tienen que sortear formando un carácter tranquilo, sereno, pero intransigente en sus ideales.Juárez colaboró primero y dirigió después a una de las generaciones más brillantes y honestas que ha tenido el país. Ni el oro, ni la sangre mancharon nunca las manos de Valentín Gómez Farías, elDr. Mora, Melchor Ocampo, Francisco Zarco, Juan Álvarez, Guillermo Prieto, Zaragoza, González Ortega, Ignacio Manuel Altamirano, Ponciano Arriaga entre otros.
Escala la cima de la gloria ytambién el camino de su calvario, como Regidor del Ayuntamiento, Diputado Federal y gobernador de su estado, demostró ser un inflexible amigo de la justicia y enemigo de los déspotas, posición que le granjeael destierro. Lo arrancan de su familia y de su país, sufre prisión, hambre y ostracismo allá en Nueva Orleans. Pero su temple es de acero y saca fuerzas de su misma flaqueza porque en vez delamentarse y entregarse a la nostalgia, aprovecha su soledad para acuñar un ideario político ciento por ciento meditado. Se traza en su cerebro desde entonces la línea recta de la justicia que ni los lazosfamiliares ni la espada de los generales, lograron torcer.
A su destierro le llegan halagüeñas noticias. La Revolución Popular de Ayutla arrojó al dictador Santa Anna y Juárez regresa a su...
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