Origen de la familia





















MASTER DE ANTROPOLOGÍA: CULTURA ,MIGRACIÓN Y SALUD
FAMILIA Y RELACIONES SOCIALES DE PARENTESCO
PROFESOR JOSE LORITE MENA

ALUMNA: MARIA RITA MARTINEZ TORRESDNI: 74355792N
MARIARITA.MARTINEZ@UM.ES


EL ORDEN FEMENINO
ORIGEN DE UN SIMULACRO CULTURAL

RESUMEN
Nuestra época tantea su realidad ante las posibilidades de un desorden radical- quizás el más profundo que haya enfrentado nuestra especie -: la mujer se piensa. Esta auto –constitución en espacio de pensamiento desencadena una alteración sin precedentes en la noción de realidad de lo humano: una bifurcación inédita del pensamiento y de realidad .El punto de disyunción-una situación del pensamiento frente a la realidad más que un estricto momento histórico-está caracterizado por la emergencia de un nuevo deseo: el del pensamiento dela mujer que busca una identidad propia. Ahí se instala la posibilidad de des-orden, en la constitución de un deseo que ,por su misma presencia , ha empezado a diluir el orden establecido de los signos , a despojarlos de su carácter determinante , definitivo y “ natutal”.
La ambigüedad ha invadido la estructura de los referentes humanos desde el momento en que ha surgido el deseo de la mujer a sermujer .Un deseo que va de la mujer a la mujer. O más exactamente, un deseo de la mujer por encontrase como mujer.
La mujer ha sido productora y reproductora , al menos en los orígenes de la socialización específicamente humana. La mujer únicamente reproductora ha pertenecido siempre a un sector muy restringido de la burguesía histórica, es esa mujer casi exclusivamente reproductora la queinició una reivindicación de otros posibles para el ser( o no ser) de la mujer. Un problema distinto es el de la valoración social de las actividades concretas de las mujer por ser mujer- o más adecuadamente por no ser hombre; o intentando ser más exacto : por no ser sino para el hombre -. Y aquí reaparece , como el centro de un círculo problemático, una esfera interpretativa de símbolos y signos queconstituye , no obstante la dificultad para cuantificarla, un factor decisivo para la comprensión de la realidad .
En segundo lugar, y como simple consecuencia de la operativización de esa tesis ( o paradigma) general, se absolutiza el “ ascenso” de la mujer a la categoría de productora como el factor decisivo para su liberación.
En tercer lugar, y redundando en los aspectos mencionados paraindicar otra faceta del mismo problema , se pude pensar legítimamente , como ya lo ha indicado más de un autor , que la “mujer trabajadora” no es necesariamente una mujer liberada. Al contrario ,ya que la única ventaja que ha encontrado en este nuevo eje de actividad ha sido la de integrarse en un espacio en el cual el hombre ya era ( y es ) injustamente considerado.
En cuarto lugar, y finalmente ,aunque se puede considerar que la “ salida” del hogar ha sido benéfica para la mujer bajo más de un aspecto- la misma generalidad de este tópico puede ocultar una falacia radical: salir del hogar no implica ,necesariamente , liberarse de la subordinación que arrastran las estructuras familiares ni de la distribución tradicional de las tareas domésticas.
Es cierto que la estructura del hogar , taly como ha existido hasta el momento- basada en un orden de signos que reduce a la mujer al simulacro-, debe ser profundamente cuestionada , y a ello a contribuido notablemente la salida de la mujer hacia un espacio laboral y público.
Las indicaciones hechas hasta el momento ponen de manifiesto la ambigüedad de la situación, la inseguridad de un deseo y la dificultad para asumirlo. Es cierto...