Pancreas de juan

Soy el pancreas de juan
aunque casi no me toman en cuenta, mi papel es de capital importancia en la digestión, en la elaboración de hormonas y enzimas
indispensables, y en el mantenimiento del equilibrio del azúcar en la sangre, fundamental para la vida.
Mi tamaño  y mi forma son más o menos los de la lengua de un perro grande: mido unos quince centímetros de longitud, soy de color rosagrisáceo, peso unos 65 gramos y me alojo en lo más profundo del abdomen de Juan (entre el estómago y la columna vertebral), en una región atestada de órganos, entre ellos el hígado, los rinones y el intestino grueso. Como Juan ha comido molleja de ternera, sabe cuál es mi consistencia. Soy su páncreas .
Aunque ya gozo una excelente publicidad, SOY UNA vícera MUY OCUPADA . Sin las enzimas que elaboro,Juan podría consumir montañas de alimentos y, no obstante, estar mal nutrido, Cada vez que parpadea o que
late su corazón, las células deben proporcionar energía. Yo me encargo de que haya combustible a mano para atizar los fuegos celulares.
En realidad consto de dos glándulas envueltas en un paquete y produzco dos potentes hormonas que vierto en el torrente sanguíneo. LA GLUCOSA DE JUAN, OAZúCAR DE LA SANGRE, ES COMBUSTIBLE PARA CELULAS , la pricipal fuente de energia; mi insulina mantiene el azucar en la concentración adecuada y asegura que se queme como es debido, tareas critica y delicada si las hay.
Para el gran papel que desempeño en la digestión, elaboro diariamente un litro de jugos digestivos. Cuando los alimentos salen del estomago, estan convertidos en una masa muy acida oquino. (Juan se queja a veces de acidez estomacal, pero el acido sirve para comenzar a fraccionar las moléculas de proteinas.) Este acido podria dañar gravemente otro tramo del tubo digestivo, corroyendo el delicado recubrimiento del intestino delgado, y mi deber es neutralizarlo con la producción de una cantida suficiente de jugo alcalino.
En cuanto Juan se sienta a la mesa del comedor, mis decenasde miles de acinos, semejantes a diminutos sacos, reciben una señal del sistema nervioso que los impulsa a fabricar jugos alcalinos. Pero yo no me sorpresuro hasta que el quimo empieza a escurrir por el piloro (significa portero) pasaje del estomago al duodeno , primer tramo abolsado de veinticinco centímetros del intestino delgado. Como medida de autoprotección, el duodeno comienza a elaboraruna hormona llamada secretina, cuyo mensaje quimico me llega atraves de la sangre, estimulando asta el maximo mi secrecion de liquido alcalino. En realidad, neutralizar acido no es una hazaña quimica muy impresionante. Alguna de mis otras tareas lo son mucho mas.Por ejem, si la mayoria de los alimentos que Juan
Come entraran en su torrente sanguineo tal como el los ingiere, muy pront
o moriria.PERO NO LE CAUSA DAÑO GRACIas a mi, pues yo soy el que mas contribuye a hacerlos asimilables.
Para este cometido elaboro tres ingeniosas enzimas. UNA DE ELLAS, LA TRIPSINA, descompone las proteínas en aminoácidos, que el torrente sanguineo distribuye por el organismo para formar tejidos. Otra enzima, la amilasa, convierte el almidon en azucar. La tercera, la lipasa, ataca los glóbulos de grasa ylos transforma en acidos grasos y glicerina. Ya coma JUAN un plato digno de un gastronomo o una salchicha, los resultados serian muy semejantes: productos finales totalmente distintos de los manjares con que se deleito en el momento de llevarlos a la boca.
Por fortuna poseo una capacidad productiva que excede con mucho la demanda de mis jugos digestivos. La mitad de mis acinos podria satisfacela.Y Juan sobreviria aunque yo no produjera nada . La saliva y las secreciones gastrica e intestinales suplirian en parte mi labor. Pero su digestión sin mi seria un suplicio. Mi tares primordial es la elaboración de insulina. Si no la cumplo bien , Juan, como la mayoria de personas, padecera de diabetes, mi producción deficiente de esta hormona significaba no solo diabetes, sino la muerte,...