Parábola De Una Madre Y Su Hijo
He aquí la parábola de la madre y el hijo que emprendió un largo viaje. la madre le dijo a su hijo antes de partir: <<Hijo mío, es preciso que te vayas, perono olvides que aquí dejas a tu madre que desea ardientemente tu felicidad y quiere verte regresar triunfante y feliz. Me gustaría acompañarte, pues es duro y peligroso para un joven andar solo por elmundo, pero tú sabes que me es imposible. Anda, pues, pero busca un amigo que te acompañe en tu camino. No elijas a cualquiera, elige al que te pueda proporcionar felicidad auténtica>>.
Y, ¿aquién voy a elegir, madre, le preguntó el muchacho? ¿Cuál puede ser ese amigo que tú deseas para mí? La madre le besó por última vez, le susurró unas palabras al oído y le repitió: <<Sólo a ese,hijo mío, sólo a ese has de aceptar>>. Y el hijo partió por los caminos del mundo. Mientras caminaba, pasó ante sus ojos algo así como una sombra luminosa y oyó una voz que le decía:
¿Mequieres por compañero de viaje? ¿Cómo te llamas?, le preguntó el joven caminante. Yo soy… ¡la gloria! ¡La gloria! No, no es ese el nombre que me recomendó mi madre al partir. Dispensa, no te necesito.Más tarde se estremeció dulcemente su ser al escuchar una voz suave, como el canto del pastor del valle.
¿Me quieres a mí, le dijo, por compañero de viaje? ¿Cómo es tu nombre? Mi nombre es…¡placer! No, tampoco ese es el nombre que mi madre me recomendó. Déjame, no quiero nada contigo… Y el joven siguió su camino. Más adelante le pareció que sus pies se deslizaban sobre el césped y que susmiembros habían olvidado la fatiga. Y una voz acariciadora, como la brisa suave, le susurró al oído:
¿Me quieres a mí, le dijo, por compañero de viaje? Tú, ¿y quién eres?, le interpeló el jovencaminante. Yo soy… ¡el Deber! Oh, sí, sí, exclamó el muchacho. Ese, ese, es el nombre que mi madre me susurró al oído al partir. Vente conmigo. Sé mi amigo y mi guía… y el deber fue el compañero de su...
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