Para quien quiera enseñar literatura

Quienquiera que enseñe o interprete literatura −y los dos ejercicios buscan construir para el escritor un cuerpo de respuesta viva, capaz de discernir − debe preguntarse que pretende (dirigir, guiar a alguien a través de Lear o de la Orestíada equivale a tomar en nuestras manos los resortes de su ser).
Los supuestos del valor de la cultura humanística en relación con la percepción moral delindividuo y de la sociedad eran evidentes de por sí para Jhonson, Coleridge o Arnold. Hoy están en duda. Debemos alimentar la sospecha de que el estudio y la transmisión de la literatura tengan sólo un significado marginal, sean apenas un lujo apasionado, como la conservación de lo antiguo. O, en el peor de los casos, que distraigan de utilizaciones más responsables y acuciantes el tiempo y laenergía del espíritu. No creo que ninguna de las dos posibilidades sea cierta. Pero la pregunta debe plantearse y profundizarse sin remilgos.
George Steiner1

Si planteamos la escritura como la posibilidad de dejar marcas2 "... el deseo de escribir es también, muy oscuramente, deseo de escribir sobre el deseo – en el fondo, deseo imposible de escribir sobre el deseo imposible..." (O. Mannoni)

Laescritura pone el juego la posibilidad de dejar una huella. De pisar por primera vez, una primera vez figurada y armada sólo en y para nosotros, ese terreno limpio en el que podemos dejar nuestra marca. Para que se haga eco, para que sobreviva. Nos sobreviva. Nos libere. Nos devuelva al mundo. Nos recuerde nuestra voz. Nuestro pulso. Eso que sabemos escondido, agazapado, temeroso y casi perdido.Eso que consideramos el más inocente yo, la fuerza primitiva de nuestra constitución, esa fuerza que para hacerse presente deberá ser dicha, escrita, trazada, para que desde afuera funciones no sólo como un espejo, sino, además, como seguro de identidad, como registro de autoidentificación.

Sin embargo, a pesar de las buenas intenciones, la escritura sigue siendo un arma cargada apuntandodirectamente hacia aquello que pretende liberar.
"... Un hombre escribe para expulsar todo el veneno que ha acumulado a causa de su forma de vida falsa. Trata de recuperar su inocencia y, sin embargo, lo único que consigue es inocular al mundo con el virus de su desilusión..." (Henry Miller)

¿Cuál es el veneno adolescente? ¿Cuál es el deseo de dejar marca? ¿Cómo marcar trazos sino a través de laescritura?
Trabajaremos al amor como esa “marca” adolescente.

Esta serie textual está diseñada para adolescentes y está planteada de manera vertical, en el sentido que primero se dan los hechos o datos (textos y reconocimiento e identificación de palabras) para luego conceptualizarlos en una situación comunicativa como lo es la lectura y recuperación de los mismos en un texto literario.

Elelemento convocante será “El amor” y los textos que integrarán esta serie serán:
“Soneto XV” de Elizabeth Barret Browning, poema elegido de Emily Dickinson, “El enamorado” de Jorge Luis Borges y “La enamorada” de Alejandra Pizarnik.

La elección de los textos tiene que ver con mi recorrido de lectura y la aceptación de los adolescentes a la problemática amorosa. ¿Quién mejor que un poema paraexpresarlo?

La actividad propuesta será plantearse en situación de enamoramiento y constituirse en escritor de un poema de amor: “tomar la decisión de escribir, de dejar una marca”.

La ocasión a veces no está, en ese caso habrá que crearla3.

En un clima propicio y ambientado para tal fin, facilitar el momento de la expresión, de la “creación” para después “dar la palabra”, exponer en voz alta,hacerse cargo del texto.

Como segunda actividad y más enfocado en el texto de Elizabeth Barret Browning se extraerán y analizarán los verbos reconociendo la persona, tiempo y modo para así entender el mensaje que quiso dar la autora entendiendo al verbo como enlace fundamental de toda situación comunicativa.

El verbo es un hacedor de relatos. Un verbo en potencial o subjuntivo puede...