Parafiscalidad electoral / publicada en portafolio
La parafiscalidad electoral
ÁLVARO JOSÉ COBO SOTO
Presidente Ejecutivo Asocajas
Había preferido mantenerme al margen de las discusiones públicas que sobre la parafiscalidad se están ventilando por estos días con mucha fuerza en las campañas políticas y en los medios de comunicación, por una razón fundamental: no quería vincular las cajasde Compensación Familiar en el proceso electoral que estamos viviendo, sin embargo, cuando de la discusión académica se pasa al agravio y a las posiciones retardatarias de los detractores, me veo en la necesidad de entrar en defensa de los aportes que hacen los empresarios con destino al mejoramiento de la calidad de vida de sus trabajadores.
Primero, cuando se tildan los parafiscales de serlos culpables del desempleo y la informalidad empresarial, tengo que volver al mismo cuento de que no existe evidencia alguna para señalar que los aportes empresariales del 4% generan desempleo en Colombia, los que así lo señalan tampoco aportan soluciones ni dan a conocer ¿cuál es el modelo que proponen? por el contrario, pareciera, o eso es lo que se vislumbra, que lo que buscan es promover en elpaís menos redistribución del ingreso, más concentración de la riqueza y repartir aún más la pobreza en el país, perjudicando las pequeñas y medianas empresas y a los trabajadores con ingresos inferiores a cuatro salarios mínimos mensuales, que son los mayores destinatarios del Subsidio Familiar.
También sostienen que los parafiscales son los culpables de las altas cargas laborales y que porlo tanto no hay contratación. Es bueno recordar que en Colombia, desde 1985 hasta 2010, los costos asociados a la nómina con cargo a los empleadores por concepto de salud se han casi que duplicado, pasando del 4.7% al 8.5%; en pensiones se han triplicado, pasando del 4.3% al 12.0%, mientras que los aportes empresariales a las Cajas de Compensación Familiar no se han incrementado desde suestablecimiento en 1957. Entonces, desconocemos cuál es la razón por la cual los enemigos de estos aportes omitan estos hechos.
Sobre la propuesta de cambiar la financiación de los recargos laborales al impuesto de renta de las empresas y personas naturales tendría, en el mejor de los casos, resultados neutros, aun en términos de empleo, si se hace con criterios de equidad tributaria. Considerando lavaloración que tienen los empresarios sobre los parafiscales o los impuestos, el resultado también sería negativo, tanto para el empleo como para la tributación. Se debe señalar que para los empresarios los impuestos son más costosos que los parafiscales, considerando la valoración que estos tienen sobre los servicios que reciben sus trabajadores vía parafiscales. Sobra señalar que los impuestos sonsiempre considerados como cargas tributarias.
De otro lado, hay que analizar el efecto que una reducción no compensada de la tasa de los parafiscales pueda tener sobre el empleo. Experiencias de otros países han mostrado que la disminución de impuestos a la nomina o subvenciones a los salarios no genera cambios significativos en la contratación, y en cambio, restringen en igual proporción losservicios que reciben los trabajadores y el bienestar social. En Suecia fueron documentados los resultados ocupacionales de dos episodios de disminución diferenciada a nivel regional en los impuestos a la nómina, el primero en 1984 y el segundo en 2002, y en ninguna de las dos circunstancias se encontró evidencia estadísticamente significativa a favor de un aumento de la ocupación. Un experimentosimilar de exención regional diferenciada en los impuestos al trabajo se dio en Finlandia en 2003 con hallazgos idénticos al caso sueco en materia de empleo. En América Latina, la experiencia de Chile, que en 1981 redujo sustancialmente las contribuciones a seguridad social, tampoco evidenció efectos importantes sobre los niveles de empleo.
En el documento La Parafiscalidad Laboral en...
Regístrate para leer el documento completo.