Paratexto

Paratexto

Para qué las tapas: practicidad del uso de paratextos
(fragmentos)

Mónica Alejandra Roca

Existen varias definiciones de paratextos, algunas de las cuales son realmente simpáticas y accesibles, por ejemplo: “Podríamos decir que el paratexto es lo que queda de un libro u otro tipo de publicación sacando el texto principal” (Alvarado, Maite. Paratexto: 13)
Genette, entre otrasdefiniciones dice que paratexto es lo que hace que el texto se transforme en libro y se proponga como tal a sus lectores y al público en general. Además, es básicamente, “un discurso auxiliar, al servicio del texto, que es su razón de ser.”

¿Dónde se habla de paratextos o se los toma en consideración?
Eliseo Verón dice que el libro “es ante todo un lugar, un espacio (en el sentido material deltermino) en el que se puede entrar y del cual se puede salir” y que un libro no se parece a nada. “se trata de un espacio de reenvíos y trayectos –dice-de avances y retrocesos, de altos y bajos (...) Pero el objeto tiene un interior que no se parece al interior de ningún objeto (...) Ese interior tiene zonas (o habitaciones); tal vez la metáfora de la casa sea conveniente para el libro. Puedorecorrerlas y entrar en la que tengo ganas de entrar. Las zonas están estructuralmente marcadas (como por ejemplo este preámbulo, que es una zona diferenciada de las tres partes que vienen después), pero yo puedo elegir a cuál entrar y quedarme cuanto tiempo quiera” (tapa y contratapa).

Relación entre los paratextos y los lectores
Verón (op.cit., pg. 63 y siguientes) realiza una caracterización detipos de lectura y sus respectivos lectores. Hay tres de ellos en especial que tienen diferente relación respecto de los paratextos. Uno, es el lector problemático –aquel cuya lectura se organiza en torno a un
problema que no corresponde a un dominio temático general ni a una disciplina específica-, que rechaza la modalidad del estante abierto que necesita de un buen manejo de paratextos ya quela elección es directa por parte de la persona, y “añora las bibliotecas tradicionales (...)
Las dificultades (o las mediaciones) que hay que atravesar para llegar al libro que uno busca, son en cierto modo una garantía del deseo del libro. El lector problemático critica el libre acceso como ‘demagogia de la lectura’, describiéndolo como un supermercado del consumo de libros”. Este lector tampocose lleva bien con los sistemas de clasificación que adoptan tanto las bibliotecas como las librerías, ya que sus proposiciones atraviesan transversalmente toda posible reunión temática. Necesita de mediadores, por ejemplo un buen bibliotecario o librero, que le garanticen la elección.
Otro tipo de lector es el ficcional por género: un gran consumidor de los medios de comunicación, de los que sesirve al momento de elegir. Por lo tanto tiene una relación
indirecta con los libros y mucho más cercana con los paratextos mostrados mediáticamente.
Luego está el lector de novedades, que mira las tapas de los libros buscando los de
publicación más reciente. En cierta forma se comporta como el lector ficcional. Busca entre
los libros devueltos por otros, se guía por los lomos para laelección, según su estado sabe si el libro es nuevo o ha sido muy utilizado y ese es un dato que tiene en cuenta en un sentido o en otro.
Los no lectores y aquellas personas denominadas analfabetos funcionales, son los más beneficiados si acceden al manejo de paratextos: pueden elaborar hipótesis a partir de los elementos paratextuales del editor, utilizar aquellos elementos visuales a los que estáacostumbrado por el uso de imágenes que hacen los medios de comunicación.
Entre los que hacen uso profesional de los paratextos, los bibliotecarios hacen uso escaso de ellos cuando tienen que elegir un material, por ejemplo a la hora de solicitar libros o revistas para su compra: generalmente se guían más por la demanda insatisfecha que por su propio criterio, la manipulación de los materiales y la...