Participacion

Con cierta sorpresa ha recibido el país la noticia de que el proceso descentralizador cumplió 20 años, sin que las expectativas generales creadas alrededor del mayor logro político constitucional dela segunda mitad del siglo pasado, hayan sido resueltas en términos de transformaciones estructurales de las condiciones de exclusión y pobreza en que sobreviven amplios grupos de la poblacióncolombiana, y sin que sean claros los logros alcanzados en la transformación del mapa político y de representación social del país.
Ligada a una narrativa inicial de transformación orgánica de relacionessociales y políticas, que vincularon los escenarios más locales a una propuesta de ampliación e inclusión de intereses diversos al marco de las políticas públicas y lógicas descentralizadas deadministración y gobierno; los rumbos tomados por los propósitos descentralizadores han construido un conjunto de preguntas, entre las cuales los logros y alcances de la participación social y política,adquiere especial relevancia, en tanto ejercicio fundamental al encuentro de rutas objetivas de diálogo, concertación y transformación de problemáticas características de una sociedad marcada por fuertesindicadores de inequidad y exclusión social.
Si bien, a la fecha puede decirse que el proceso ha contribuido de manera diferenciada a ampliar y complejizar el mapa de actores políticos regionales ynacionales, incidiendo en una estructura cerrada de partidos, incapaces de incorporar y responder al conjunto de intereses diversos y necesidades regionales propias de un país reconocido por lo pluri desu territorio y su cultura, el mismo proceso pareciera no haber logrado afectar de manera importante los indicadores de inclusión e integración social que han acompañado la historia reciente y lospropósitos integradores de la descentralización.
En materia de integración social, por ejemplo, Colombia forma parte de una de las regiones con mayor desigualdad en el planeta. Los principales...