Pastoral

DISCURSO DEL PAPA JUAN PABLO II
A UNA REPRESENTACIÓN DE RESPONSABLES,
PROFESORES Y ALUMNOS DE LAS ESCUELAS ROMANAS


Sábado13 de febrero de 1999
 El discurso que escribe el Papa Juan Pablo II,en la fecha del día Sábado13 de febrero del año 1999, transcurre en el Año Santo, en tiempo de preparación para el gran jubileo, es una fuerte exhortación a la conversión del corazón, a fin dereconocer y acoger la presencia del Dios.
El gran jubileo conllevó un fuerte compromiso en favor de la justicia y la solidaridad y, por tanto, impulsó iniciativas concretas para que los hombresy las mujeres, los niños y los ancianos, los que sufren y los marginados, encuentren su lugar en la casa común de la humanidad, se les reconozca y acoja como hermanos, y se les ayude a alcanzar unacalidad de vida digna de los hijos de Dios.
En este campo, la escuela y la educación en general tienen la tarea de ser caminos de auténtica liberación del hombre de la esclavitud de la ignorancia. Elfuturo de la humanidad y el desarrollo social de una nación dependen en gran medida de la calidad de la escuela y del compromiso con que se propone ser una comunidad educativa para todos sus miembros.El Papa propone y desea que se proyecte con creatividad y valentía el futuro de las escuelas, y dice:
“Es necesario favorecer proyectos educativos y culturales apropiados a las exigencias de unapromoción plena de la persona, que sigue siendo el sujeto central de la escuela, y a la cual hay que destinar los programas, las intervenciones y las iniciativas”.
De ésta manera, la escuela setransformaría en una comunidad que educa en la búsqueda de la verdad y en la comprensión de la propia dignidad personal, transmite cultura y valores para la vida, capacita para una profesión al serviciode la sociedad, abre al encuentro y al diálogo interpersonal y comunitario, y responde a las exigencias de crecimiento humano y espiritual, cultural y social de los muchachos y los jóvenes.
De un...