Pedagogia
El enfoque hermenéutico adoptado en este estudio parte de afirmar que el relato pedagógico constituye el dispositivo central para la sistematización de la práctica pedagógica. El relato pedagógico, en este contexto se entiende como una herramienta metodológica que posibilita, gradualmente, la explicitacióndel saber cómo o racionalidad práctica del maestro, para producir un saber qué o conocimiento pedagógico:
En la medida en que avanzamos por el espectro o el continuum, y esto significa reflexionar, verbalizar y escribir sobre los saberes, más nos desplazamos hacia el conocimiento; estos se sitúan en el momento opuesto del espectro al que se ubican los saberes. Los conocimientos se consideran comoel resultado de operacionalizar procesos sistemáticos de reflexión, explicitación y verbalización sobre los saberes; es decir, en la medida en que los saberes son recontextualizados teórica, conceptual y políticamente, en los que median, por lo menos, profundos procesos de racionalidad crítica y de interacción comunicativa, estos saberes evidencian una dinámica de mutación y de transformaciónhacia momentos cualitativamente distintos que llamaremos conocimientos. Ahora, estos conocimientos van, seguramente, a generar, o por lo menos a enriquecer, nuevas prácticas sociales, las que a su vez generarán nuevos saberes que al ser reflexionados y recontextualizados inician su proceso de conversión para continuar en esta espiral, cada vez más rica y compleja.
De ahí que no se trata de unarelación de oposición entre saber y conocimiento como tradicionalmente se ha identificado esta relación, desde los enfoques positivistas, pragmáticos, neoconservadores y románticos; por el contrario, se trata de una relación dialéctica e interactiva cruzada por el problema del poder en la medida en que pone en juego la posibilidad de empoderamiento de los actores sociales que participan de estasprácticas sociales (Cinde, 2010: 29)
El relato pedagógico, es pues constitutivo de la significatividad que posee la experiencia para quienes la han configurado y participado en ella, pero además para quienes pueden leerla, comprenderla e interpretarla al compartir con ella un campo semántico y de la praxis. Apuntar a entender el sentido de un relato pedagógico implica, de manera previa, abordarconceptualmente en qué consiste la significatividad de una experiencia pedagógica. En este contexto, el MEN ha definido como experiencias significativas a todas aquellas prácticas concretas (programa, proyecto actividad) que se gestan en ámbitos educativos y tienen como propósito “desarrollar un aprendizaje significativo a través del fomento de competencias” (MEN, 2010: 7). Una experienciasignificativa se caracteriza por un proceso permanente de autorreflexión y crítica, “es innovadora, atiende a una necesidad del contexto identificada previamente, cuenta con una fundamentación teórica y metodológica coherente y genera un impacto positivo en la calidad de vida de la comunidad en la cual está inmersa” (Ibíd).
Una experiencia significativa es, de este modo, una “práctica concreta porque sesitúa en un espacio y tiempo determinados, desarrollado acciones y actividades identificables” (Ibíd); es además sistemática “porque sus acciones llevan un orden lógico, guiado por un principio de organización interna. Las experiencias significativas, son, por otro lado, evidenciables “porque consiguen sus objetivos y poseen mecanismos para demostrarlos”, autorreguladas, “porque analizan yreflexionan sobre su desarrollo, identificando sus fortalezas y oportunidades de mejora”, y contextualizadas, porque “planean sus acciones en estrecha relación con el medio cultural, social y político, y las necesidades de desarrollo de las comunidades educativas a las cuales atienden” (Ibíd).
En suma, las experiencias significativas posibilitan la transformación de las prácticas institucionales...
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